Hansi Flick alerta sobre la actitud del Barça antes de visitar al Celta en Balaídos

Aunque el Barça ocupa la segunda posición en LaLiga, su técnico alemán, Hansi Flick, dejó claro que el rendimiento colectivo está lejos del nivel esperado. “Queremos ganar allí, porque es importante irnos al parón con tres puntos más”, afirmó. El técnico insistió en que todo pasa por la mentalidad, más allá de recursos tácticos puntuales.

En el cuerpo técnico preocupa la desconexión entre líneas vista en las últimas semanas, algo que genera espacios enormes para los rivales y obliga a un desgaste innecesario. Ese detalle se amplifica a domicilio, donde la agresividad rival suele poner contra las cuerdas a la defensa culé.

Un Barça desconectado

Flick reconoció que el equipo ha perdido confianza y estructura sin balón. “Nuestra última línea está siempre un poco demasiado atrás”, explicó, algo que genera metros libres para que el rival progrese y obliga a otros jugadores a compensar fuera de zona.

Además, el entrenador cree que el bloque de ataque también está demasiado lejos del plan propuesto. De ahí la falta de fluidez ofensiva: el equipo llega tarde a la presión y pierde velocidad en la fase creativa. Para Flick, recuperar sincronización será una prioridad inmediata.

El técnico alemán insistió en que los jugadores saben exactamente lo que deben hacer, pero deben ejecutarlo en el césped. La falta de continuidad en la presión y la escasa agresividad en duelos individuales son dos aspectos que, según aseguró, no pueden repetirse.

Un nuevo estadio que puede empujar al equipo

Flick también dedicó un espacio a hablar del nuevo Spotify Camp Nou, un factor emocional que cree clave para el futuro inmediato del club. El entrenador aseguró que jugar allí de nuevo envolvió al equipo con sensaciones extraordinarias.

La cercanía del público y la acústica aumentada pueden reforzar un vestuario algo debilitado por lesiones y falta de contundencia competitiva. El técnico no ocultó su emoción por la atmósfera generada, señalando la importancia estructural del proyecto.

Lesiones, bajas sensibles y dudas en la defensa

El Barça sigue arrastrando un parte médico muy exigente. Flick reconoció que se echa en falta a varios titulares de peso, lo cual condiciona la planificación semanal. El entrenador confía en que se recuperen tras el parón y puedan aportar intensidad de inmediato.

Respecto al estado de Joan García, la evolución es positiva y el club contempla que vuelva después del parón. Con Eric García todo es favorable y podrá jugar con máscara protectora, mientras que Jules Koundé genera dudas tras no completar el entrenamiento.

Gavi, Lamine Yamal y la necesidad de paciencia

Sobre Gavi, Flick fue claro: su impacto es indiscutible, pero pensar en él ahora no es una opción. Su energía, agresividad y lectura son piezas que el equipo echa de menos, especialmente en momentos de bloqueo emocional.

En el caso de Lamine Yamal, el técnico elogió su madurez reciente y su disciplina fuera del terreno de juego, aunque advirtió de que aún no está plenamente recuperado. Su carga muscular sigue siendo vigilada con lupa, también por la selección.

Ambos nombres simbolizan algo importante para Flick: entender que la explosión de talento joven debe gestionarse con prudencia, no con ansiedad.

Presión añadida antes del parón

El Barça llega con cinco puntos menos que el Real Madrid y sin margen de tropiezos. Para Flick, ganar en Balaídos es clave para evitar desgaste mediático y mantener una dinámica de trabajo estable durante las próximas dos semanas.

Además, el técnico asegura que no vio suficiente lucha en Brujas, señal preocupante para un equipo que aspira a competir hasta mayo.