El Betis no se rinde y Luiz Felipe prefiere morderse la lengua

"No quiero hablar nada, ya está", ha dicho el central verdiblanco que asume el castigo aunque el club de Heliópolis ha decidido acudir al Comité de Apelación

El Betis no se rinde y Luiz Felipe prefiere morderse la lengua
El Betis no se rinde y Luiz Felipe prefiere morderse la lengua - UES
Fernando RuizFernando Ruiz 5 min lectura

El Real Betis está dispuesto a llegar hasta el final y ha decidido que va a recurrir ante el Comité de Apelación la sanción de un partido que el Comité de Competición le ha impuesto al central italo-brasileño Luiz Felipe tras su expulsión el pasado sábado frente al Celta de Vigo. De esta forma, la entidad de Heliópolis intentará que el centra pueda estar disponible para el partido de LaLiga de este sábado frente al Almería, a partir de las 16:15 horas en el estadio de Los Juegos del Mediterráneo.

Mucho se ha hablado y debatido ya sobre si el central del Real Betis fue justa o injustamente expulsado en la acción en la que intenta arrebatar el balón a Iago Aspas, y por eso mismo decidió el Betis recurrir la tarjeta roja, al entender que el futbolista verdiblanco no golpea el pecho, y mucho menos la cara como simula el capitán del Celta, tal y como recogía el acta de Del Cerro Grande.

Sin embargo, Competición entiende que no hay agresión, por lo que Luiz Felipe evita una sanción más grave, aunque tampoco entiende que el recurso verdiblanco desvirtúe lo escrito en el acta, por lo que mantiene es partido de sanción.

El propio Luiz Felipe se ha mostrado resignado tras conocer la decisión de Competición a su salida del entrenamiento. "No quiero hablar nada, ya está. Lo han decidido así, tengo que respetarlo. Estoy con el presidente, estamos todos juntos. Quería jugar pero ya está", ha dicho el zaguero a los micrófonos de 'El Chiringuito'.

La resolución de Competición

Según consta en el acta arbitral, el jugador fue expulsado en el minuto 90 + 5 por “golpear con su mano en el pecho de un adversario de manera violenta cuando el balón no estaba en juego”. El jugador tuvo que ser atendido, aunque finalmente pudo continuar disputando el encuentro.

El club alega la existencia de un error material manifiesto y mantiene que el jugador expulsado no golpeó en el pecho del rival. Afirma que lo que en realidad ocurrió, siempre según el relato del club, fue que golpeó el balón que el jugador rival sujetaba en ese momento en un intento de que el juego continuase.

Comenzaremos por advertir, como ya hemos hecho en otras ocasiones, que no corresponde a este órgano disciplinario valorar actuaciones arbitrales de otros partidos que no han llegado a someterse a su consideración, aunque el club considere que, siendo similares, recibieron una respuesta diferente por parte de los colegiados.

Por lo demás, como es también sabido, la tarea de este órgano disciplinario, de acuerdo con la normativa federativa que resulta aplicable, es determinar, en su caso, la existencia de un error material manifiesto en la descripción arbitral de la acción. Como se ha dicho aquí, únicamente la prueba de un error de este tipo puede desvirtuar la apreciación realizada por el colegiado y, en consecuencia, la veracidad de lo que hizo constar en el acta. Es necesario en todo caso que se trate de un error claro o patente, independientemente de toda opinión, valoración, interpretación o calificación jurídica que pueda hacerse, circunstancias que no se dan en este caso. Lo cierto es que las imágenes aportadas por el club no permiten desvirtuar el relato arbitral. Su visionado, en definitiva, no ha permitido a este órgano disciplinario constatar la existencia del error alegado por el club.

Procede, por tanto, la imposición de un partido de suspensión al jugador D. Luiz Felipe Ramos Marchi en aplicación del artículo 121.1 del Código Disciplinario de la RFEF.

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