Novedades sobre la lesión de Ez Abde con Marruecos

Fue, sin duda, la peor noticia del estreno de Marruecos en la Copa de África. Porque, por otra parte, no pudieron salir mejor las cosas a los 'Leones del Atlas', que se impusieron por 3-0 a Tanzania para liderar con solvencia desde el principio el Grupo F, pues la República Democrática del Congo y Zambia empataron (1-1) en el otro encuentro. Sin embarto, Ez Abde tuvo que retirarse a los 71 minutos de juego, tras recibir una fuerte entrada que costó la segunda tarjeta amarilla (y consiguiente expulsión) al central rival Miroshi, si bien era la gota que colmaba el vaso físico del atacante del Real Betis, que se retorcía de dolor sobre el césped y se marchó visiblemente molesto y cojeando. El jueves hubo una jornada de descarga para los que no jugaron en la víspera, entre ellos el también verdiblanco Chadi Riad (segundo por la derecha, de pie, en la imagen inferior), en la que no hubo ni rastro del de Beni Melal, que se estuvo tratando con los fisioterapeutas.

Tanto su seleccionador, Walid Regragui, que no dudó en apostar por Abde tras su explosión en el FC Barcelona y, sobre todo, durante su cesión del curso pasado en el CA Osasuna, como en Heliópolis cruzaban los dedos para que las pruebas no revelaran un daño importante en los ligamentos de la articulación, pero parece que, una vez desaparecida la hinchazón y remitidas en parte las molestias, el tobillo derecho del extremo no está tan mal como se esperaba. Este viernes, en la vuelta al trabajo del combinado magrebí en tierras marfileñas, se le ha visto corriendo y ejercitándose aparte con el recuperador, de momento sin integrarse en el grupo, aunque se espera que mañana o pasado pueda probarse con vistas al encuentro del domingo (15:00 horas) frente a los congoleños, donde podría definirse ya el pase a las eliminatorias del magno torneo continental.

Marruecos es una de las favoritas para conquistar la Copa Africana de Naciones, que se desarrolla en el país tropical entre el 13 de enero y el 11 de febrero, aunque lo cierto es que solamente ha ganado una edición (la de 1976), quedando finalista en 2024 y tercero en 1980. El empeño en esta ocasión, prestigio aparte, es por la posibilidad de defender título en el primer mes de 2026, cuando acogerá la siguiente entrega (tras la renuncia de Guinea) de un torneo que se celebra desde hace 66 años y que iba a ajustarse entonces al calendario más habitual en el Hemisferio Norte, pero también en otros continentes (salvo Asia y África), que celebra Eurocopa, Mundial y Copa América en los meses de julio o agosto. De hecho, ya se iba a imitar el cambio de 2019 en la presente edición, pero el calor en Costa de Marfil por esas fechas desaconsejaba la mudanza. En 2025, está previsto que se juegue la nueva y ampliada Copa Mundial de Clubes de la FIFA, por lo que la coordinación tendrá que esperar, al menos, hasta 2028.