Perraud y el Cucho, el ejemplo de cómo funciona el engranaje
El lateral, que marcó saliendo desde el banquillo, se queda con que fue "una gran victoria de equipo", al tiempo que el delantero, inhabilitado en la Conference, combate su "impotencia" sabiendo que quien entre lo hará "igual o mejor"


Betis
Valladolid

"Es cierto que fue un golazo, pero tengo que agradecer al Cucho que me diera ese balón tan bueno en pared para pegarle con todo ante el portero. Es un gran gol para mí, pero sobre todo es una gran victoria de equipo. Era difícil rendir con tantos partidos seguidos en 10-11 días. Era el último de la semana y no era fácil mantener la intensidad. No arrancamos bien, pero en la segundo estuvimos un poco mejor, gracias al esfuerzo de todo el grupo, para amarrar ese triunfo tan importante. Quedan cinco partidos más y necesitaremos seguir igual de concentrados. Ahora, tenemos inspiración para hacer goles y un espíritu fantástico. Vamos a ver... Hay un ambiente fenomenal en este vestuario que nos da fuerzas a nosotros y al club para hacer buenas cosas hasta el final de la temporada", aseguraba en zona mixta al querido Edu Carrillo de RTV Betis Romain Perraud en un más que correcto español.

El lateral francés, que ya brindó una gran asistencia en Girona an Antony en el 0-2, remató su gran semana fusilando a André Ferreira para poner tierra de por medio en un marcador que habían encauzado Jesús Rodríguez, el delantero colombiano e Isco Alarcón y que cerraría con el quinto Ez Abde. Sin tiempo casi para disfrutar, viene la competición continental, donde el zurdo quiere que todo siga de dulce: "Vienen dos partidos muy importantes para todos, para la afición y para nosotros; vamos a soñar, porque este grupo quiere ganar el título de la Conference, así que vamos a darlo todo ante la Fiorentina". Una cita que se perderá, muy a su pesar, su asistente, resignado pero feliz pese a ello: "Ahora, a pensar en la Conference. Me encantaría estar el jueves, la verdad, porque siento mucha impotencia desde casa, pero el equipo lo está haciendo muy bien y hay jugadores que pueden entrar para hacerlo igual o mejor que el que sale. De esa competitividad tan alta nos beneficiamos".
Y es que Juan Camilo Hernández era un hombre feliz. Tras un arranque donde anduvo voluntarioso, pudo marcar, rozó el segundo y sumó una asistencia y media: "El primer tiempo no fue el mejor. Nos faltó esa chispa con la que salimos siempre dentro y fuera de casa, pero en el segundo entramos de forma muy diferente. Sabía que tenía que aportar, porque para eso vine. Era un partido de Champions, como quien dice; me gustaría marcar más, aunque a veces no se puede e intento ayudar en todo lo demás. El de Jesús toca en Aidoo, pero espero que me cuente (risas). Él me dijo que cómo le había visto y le contesté 'no sé, hermano, sabía que estabas ahí'". Además, habló del gran servicio de Bartra y de su tanto: "Marc tiene esas cosas; cuando va con la pelota hacia arriba, siempre tienes la sensación de que algo va a pasar. Cuando hizo el amago y atacó el balón, decidí ir al primer palo".

Para el 'Cucho', su testarazo "no es fácil, aunque en el campo me parecía más cerca; viéndolo repetido, había mucha distancia". Aunque no es su especialidad, el colombiano estaba feliz de ayudar también de cabeza: "No soy muy grande, pero sí tengo un cuello fuerte para saltar y girar. Gracias a Marc y a todo el equipo; hicimos cinco goles, que no está nada mal, con cinco anotadores diferentes, lo que demuestra la ambición de un grupo en el que todos quieren sumar. Vamos a seguir hasta el final, aunque no va a ser fácil; eso sí, estamos preparados. Muy contentos de dormir quintos en la clasificación de Primera división, porque este club se lo merece; los hinchas son increíbles, con más de 50.000 personas cada partido de casa y muchos también cuando jugamos fuera. Tenemos que devolverlo sobre el campo con victorias y buenos momentos".