Propósito de enmienda con Gonzalo Petit
El uruguayo, titular cinco jornadas y más de un mes después; los verdiblancos incluyeron penalizaciones en su contrato de cesión y la posibilidad de repescarle en enero si no tenía minutos

Gonzalo Petit fue titular con el CD Mirandés en las dos primeras jornadas de LaLiga Hypermotion, saldadas por los rojinegros con sendas derrotas ante Cádiz CF y SD Huesca. Sustituido al descanso frente a los aragoneses, el uruguayo partió desde el banquillo frente a Granada CF, Albacete Balompié, Deportivo de La Coruña y FC Andorra, aunque de nada le sirvió marcar el tanto de la victoria en el Nuevo Los Cármenes y colaborar en el 1-4 del Carlos Belmonte, con un tanto, una asistencia y una tarjeta roja provocada, pues su participación no creció en Mendizorroza ante los gallegos ni en el Principado. Una situación que encendió las alarmas en el Real Betis, preocupados sus técnicos y dirigentes por la escasa presencia sobre el césped de su gran apuesta de futuro para la vanguardia. No en vano, se invirtieron este verano algo menos de seis millones de euros.
Su condición de extracomunitario (ya estaba Natan de Souza, llegó Nelson Deossa y se esperaba de vuelta a Antony Matheus dos Santos) y su inexperiencia conllevaron su salida momentánea, aunque en La Cartuja incluyeron en el contrato de préstamo varias cláusulas para garantizarse que el ex de Nacional no pasara un año en blanco. Así, se reservaron el derecho a repescarle sin coste en enero, tanto si no se adaptaba (para variar su destino, como el año pasado con Yanis Senhadji y el CD Tenerife) como si explotaba (al no cambiar el estatus burocrático de ninguno, no podría reintegrarse a la primera plantilla heliopolitana), al tiempo que habría penalizaciones para los burgaleses en caso de que no se alcancen determinados tramos de tiempo efectivo sobre el verde, con lo que irían asumiendo porcentajes mayores de su salario y una remuneración por la cesión ahora inexistente.
Este viernes, Gonzalo Petit recuperaba la titularidad cinco jornadas y más de un mes después en el encuentro que el CD Mirandés disputaba en su nueva casa ante el Real Zaragoza. Compartiendo ataque con Carlos Fernández, el charrúa completó los noventa minutos y gozó de varias ocasiones, con cuatro disparos que no encontraron su destino, amén de descargar muchos balones de espaldas para la llegada de sus compañeros de segunda línea. Finalmente, los maños se terminaron llevando los tres puntos merced al tanto antes de la media hora de Sebas Moyano. Un disparo al larguero del pivote Rafel Bauzá fue la mejor oportunidad de los locales, que siguen de capa caída: solamente un punto de los últimos nueve al zurrón.