Real Betis 3-0 RCD Mallorca: Antony ilumina el camino directo a soñar

Cuando recibes la iluminación, poco más se puede decidir. El Real Betis, comandado por un inspirado Antony, fue capaz de vencer al RCD Mallorca por tres goles a cero, en un encuentro que quedó totalmente visto para sentencia en la primera mitad. Un doblete del extremo brasileño y un posterior tanto de Ez Abde fueron suficientes para vencer con facilidad al equipo de Jagoba Arrasate, cuyas acometidas apenas crearon peligro real sobre la meta defendida por Álvaro Valles, que tuvo que entrar en sustitución de Pau López, aquejado de molestias musculares en el calentamiento. A pesar de alguna intentona en la segunda parte, ninguno de los dos conjuntos decidió apretar el acelerados y, finalmente, la ventaja por tres goles fue la que comandó la fiesta verdiblanca, que contó con el destello de su estrella brasileña.

El Real Betis recibió la iluminación en forma de Antony

El partido se preveía movidito, con cambios en los onces iniciales justo a escasos minutos de comenzar la contienda. El club bético anunció que Pau López de caía de la alineación por problemas físicos, algo que provocó que el meta titular para esta ocasión fuese Álvaro Valles. El de La Rinconada no disputaba minutos en LaLiga desde el encuentro frente al Levante UD, viendo como su papel caía relegado a los encuentros europeos. Con todo esto, dio comienzo un encuentro que empezó con varios intentos de centros del equipo balear, con un Pablo Maffeo colgando balones en busca de un socio de garantías en el área, como es Muriqi. Sin embargo, esa negativa al encuentro permitió un mayor control bético, que castigó en la primera que tuvo. Cuando apenas habían transcurrido siete minutos de encuentro, Antony recibió en la frontal de área y, como si de una iluminación se tratase, un disparo potente suyo al palo izquierdo de la portería rival permitió poner por delante al equipo verdiblanco. Mucho simbolismo en la celebración de Antony, sabedor del papel que se espera de él en este equipo y que, con el paso de los partidos, se empieza vislumbrar ese extremo que enamoró en el Benito Villamarín.

Esa aura ya prosiguió, pareciendo que ese primer tanto le hubiese dado el timón del partido al equipo de Manuel Pellegrini. Incluso, en la jugada posterior a ese gol, Antony le sirvió un gran balón a Cucho, que vio como un rechace bermellón impidió mayor peligro sobre Bergstrom. En el Real Betis, parecía todo estar funcionando, y la afición así lo mostraba volcándose como si de una gran noche se tratase. Cierto es que el repliegue ofensivo bético estaba siendo veloz, con las principales piezas creativas juntándose, dase los ejemplos de Pablo Fornals y Abde. A pesar de eso, poco a poco el equipo de Arrasate iba cogiéndole el tono al encuentro. Con la búsqueda de los centros laterales mencionados previamente, empezaban a acumular la posesión en busca de los costados. De hecho, ahí solían estar presentes tanto Mojica como Maffeo, con un colombiano que puso un centro medido a la cabeza del delantero kosovar, que se quedó cerca de haber podido empatar la contienda. En ese apartado, los verdiblancos no se estaban mostrando contundentes, permitiendo a los isleños explotar una de sus principales vías ofensivas.

Y, cuando más empezaban a asaltar las dudas, apareció "El Iluminado". Antony llegó para ser el superhéroe de este Real Betis y, frente al RCD Mallorca, se acordó de darle brillo al traje. En una gran combinación entre el brasileño y Héctor Bellerín, el extremo recibe en la frontal y, de primeras, puso un gran disparo colocado ante el que nada pudo hacer Bergstrom. La noche estaba para él, que parecía estar liberándose de unos últimos encuentros donde nada le estaba saliendo. Y, cuando un mago empieza a actuar, la actuación no puede dejar de parar. Instantes posteriores a ese segundo tanto, Lo Celso brindaba un regalo en forma de pase filtrado a Antony. Tras eso, el brasileño la puso dentro del área, donde encontró a Abde como aliado, que apenas tuvo que empujar el balón al fondo de la red.

Fiesta total en el templo verdiblanco, que veía como los de Pellegrini eran capaces de sentenciar el duelo en menos de diez minutos. No solamente eso, ya que la actuación de Antony empezaba a crear semejanza en los béticos con aquel extremo que hacía diabluras en la Avenida de la Palmera. Con un ambiente de escándalo en La Cartuja, y con espectáculo de linternas incluido, el aluvión no parecía parar. De hecho, en la alusión a la magia anteriormente nombrada, el que se puso la chistera en un instante fue Bergstrom, que fue capaz de salvar con el pie un disparo del Cucho que ya tenía tintes de gol. Con una tremenda ovación, la afición despedía una primera parte de ensueño con hasta tres goles de ventaja.

La fiesta pudo haber sido mucho mayor

Los segundos cuarenta y cinco minutos comenzaron con un cambio lógico. Con un Ricardo Rodríguez que lo juega casi todo, Valentín Gómez decidió darle algo de descanso en ese carril izquierdo. En los primeros compases, la anestesia tras la adrenalina fue evidente, y en la segunda parte lo acusaron ambos equipos. Buena muestra de ello fue un error de Bartra que generó un pequeño susto. Intentaban los de Arrasate acercarse a la portería verdiblanca, con un Jan Virgili en el centro de operaciones balear. Sin embargo, tanto por un lado como por el otro parecían tener claro la situación del encuentro, y ninguno parecía querer meter esa última marcha para provocar un acelerón. Una ocasión de Cucho Hernández casi rompe esa tendencia, pero su disparo se acabó marchando por encima de la meta de Bergstrom. Viendo el escenario, los aficionados allí presentes aprovecharon para dibujar de nuevo un gran homenaje a Pellegrini, con una ovación que acabó agradeciendo el técnico chileno. Con el debate en torno a su renovación, la grada parece tener claro su color en esa cuestión.

Los focos claros irán a Antony, pero se suele infravalorar la gran labor que hace el Cucho Hernández, y este partido se puede poner como el gran ejemplo. El delantero cafetero estuvo casi en todos lados y fue una de los principales motivos del triunfo ofensivo bético, aunque no tuviese acertado de cara a puerta. También este encuentro dio lugar para elevar, una vez más, la gran labor de Héctor Bellerin. A pesar de no estar siendo su mejor noche, la afición bética se volcó con él tras una gran corrección Ya un error suyo que plantaba al cuadro de Arrasate con superioridad en el área. Y, si se sigue hablando de actuaciones individuales, se hace necesario hablar de Ez Abde, que casi aprovechó un grave error del meta rival en la salida de balón, en un ejemplo más de la garra que el marroquí lleva mostrando desde comienzos de temporada. Y, en estos casos, el beticismo suele estar a la altura, que lo despidió con honores del terreno de juego.

El encuentro era algo espeso, nada comparado con la vibración final de la primera mitad. Y, si antes nos referíamos a Antony como un mago con trucos inacabables, pareció que estos acabaron cuando, en una ocasión en la que estaba completamente solo, su disparo se acabó siendo rechazado desde la frontal del área. A pesar del gran partido, se mostró algo abatido por fallar eso, que hubiese supuesto su hat-trick particular. Pidiendo perdón a su aliado en la asistencia, La Cartuja le perdonó eso por todo lo que antes fue capaz de generar. La afición se mostraba contenta con su equipo, mostrándolo en cada cambio que se producía en el terreno de juego. Para poner la mejor imagen, solo es necesario remontarse a la salida de Antony del terreno de juego, con un templo verdiblanco que parecía caerse con ello. Con la entrada de Pablo García, el duelo dio lugar a que tuviese una de las últimas del encuentro aunque ese fallo provocó que se estableciese el tres a cero de forma definitiva en el electrónico.

Ficha técnica

Real Betis: Álvaro Valles; Bellerín, Bartra, Natan, Ricardo Rodríguez (Valentín Gómez 45'); Amrabat, Lo Celso (Deossa 76'), Fornals (Marc Roca 69'); Antony (Pablo García 83'), Abde (Aitor Ruibal 69') y Cucho Hernández.

RCD Mallorca: Bergstrom; Maffeo, Valjent, Raíllo, Mojica; Morlanes (Asano 63'), Samu Costa; Mateo Joseph (Pablo Torres 63'), Sergi Darder, Jan Virgili y Muriqi.

Árbitros: Jesús Gil (Colegio Extremeño) dirigió el encuentro en el césped. En la sala VOR estuvo Daniel Jesús Trujillo (Colegio Canario). Amarilla para Samu Costa

Goles: 1-0 (7') Antony; 2-0 (34') Antony; 3-0 (37') Abde

Incidencias: Partido correspondiente a la 11ª Jornada de LaLiga EA Sports, celebrado en el Estadio de La Cartuja con 54.747 espectadores. Antes del encuentro, se guardó un minuto de silencio en memoria de Fernando Aramburu, jugador del Real Betis entre 1972 y 1974.