Una bala esquivada por el momento: la lacra de las expulsiones

A veces, lo justo era señalar a los colegiados, pero, en otras ocasiones, la imprudencia de los defensores o la mala gestión se situaciones de repliegue costaron al Real Betis puntos y esfuerzo. En la 22/23, los verdiblancos fueron, de largo, los más castigados de Primera división, con 15 expulsiones, una barbaridad inadmisible a la que se ha conseguido poner freno en las últimas campañas. No en vano, el trabajo conjunto de todos, fundamentalmente en el vestuario y con el cuerpo técnico, redujo las cifras a solamente tres rojas o dobles amarillas en la 23/24 y otras tantas efectivas en la 24/25 (no cuenta la de Antony en Getafe, pues fue anulada por los comités). En lo que va de 25/26, con nueve jornadas (casi un cuarto de LaLiga) ya disputadas, ninguna.

El promedio de la 'era Pellegrini' ha bajado de las casi diez (9,7) de las tres primeras campañas (ocho en la 20/21, seis en la 21/22 y la mencionada quincena de la 22/23) a menos de tres, contando la actual, tres computando las válidas de los dos últimos ejercicios. Además, se está manejando el apartado completo, porque, aunque la campaña pasada se consiguió reducir el número de amarillas (75, segunda cifra más baja con el 'Ingeniero'), la tendencia demuestra una mayor inteligencia para jugar con esas amonestaciones durante los partidos. En este sentido, hace dos cursos se registró el número más bajo total de rojas (3), pero el más alto (84) de primeras tarjetas. La proyección actual de la 25/26 habla de 67,5 amarillas a final de temporada, más de doce menos que el promedio de las cinco anteriores (79,6).

Son ya 22 jornadas consecutivas sin acabar con diez

La última vez que el Real Betis sufrió una expulsión fue en la jornada 25ª de la campaña 24/25, cuando Antony Matheus dos Santos se marchó anticipadamente por una presunta falta alevosa en las postrimerías del duelo en el Coliseum ante el getafense Diego Rico que, posteriormente, sería corregida por el Comité de Disciplina, por lo que no tuvo efecto y el paulista pudo jugar ante el Real Madrid la semana siguiente. Fue, por tanto, la exclusión más reciente, aunque no la que quedó registrada. Para ello, hay que remontarse cinco fechas más atrás, durante el Real Betis 1-3 Deportivo Alavés, cuando Romain Perraud se marchaba a los vestuarios a los 55 minutos, ni un cuarto de hora después de haber sustituido al lesionado Ricardo Rodríguez. Estrictamente hablando, son ya 22 entregas del campeonato liguero (las trece últimas del pasado ejercicio y las nueve del presente) sin expulsiones, saldadas con once victorias, ocho empates y sólo tres derrotas.