Borja Iglesias se acuerda para mal del Betis

El gallego reconoce que está "muy contento" en el Celta y echando la vista atrás no se arrepiente de marcharse la pasada campaña al Bayer Leverkusen. Es más, desvela que anteriormente, cuando aún vestía de verdiblanco, se encontraba "un poco desencantado" con su profesión

Borja Iglesias se acuerda para mal del Betis
Borja Iglesias ha firmado cuatro goles en los dos últimos partidos. - CORDON PRESS

Borja Iglesias vuelve a ser feliz en el Celta de Vigo. Tras firmar cuatro goles en los dos últimos partidos, suma ya nueve en total y no esconde que su deseo es continuar en Balaídos más allá del 30 de junio, cuando finaliza su cesión. Su entrenador, Claudio Giráldez, también ha ha pedido públicamente su continuidad. Pero no se trata de una operación sencilla. Para empezar, porque el Real Betis querrá sacar tajada tras la revalorización de un futbolista con el que mantiene una disputa, pues en La Palmera entienden por válida una cláusula de su contrato que les asegura su propiedad hasta 2027, mientras que el gallego defiende que su vínculo acaba en 2026.

En su visita al programa 'La Revuelta' de La 1, el ariete dejó en el aire su futuro, aunque deslizó que en el conjunto celeste se siente a gusto. "¿Quién sabe qué va a pasar? Yo estoy muy contento ahora mismo, la verdad. Vivo en mi casa, estoy en mi equipo, del que he sido desde pequeño. En el Betis también estaba bien y en Alemania estuve bien. Soy un disfrutón, aunque tengo mis momentos también", aseguró, refiriéndose de ese modo a una gris campaña pasada en la que perdió protagonismo como verdiblanco (sólo hizo dos goles) y puso en enero rumbo a un Bayer Leverkusen en el que ni siquiera vio portería.

Al respecto, el santiagués no esconde que su marcha a la Bundesliga, pese a todo, fue la mejor decisión que pudo tomar, pues había perdido la ilusión a las órdenes de Manuel Pellegrini. Tras su eclosión anotadora en la 22/23, en la que hizo 15 tantos en la Liga (logró 19 el curso anterior entre todas las competiciones), Borja Iglesias ha admitido su "desencanto" no sólo con la situación que viene después, sino con el fútbol en general.

"Desde que me fui a Alemania, estoy muy contento. Hace un par de años estaba un poco desencantado de mi profesión. Es curioso, ¿verdad? Pero pasa también, seguro que más de lo que se dice. Al hombre, generalmente, no se le permite mostrarse triste o vulnerable, pero tenemos momentos, claro", comentó.

Su regreso a Heliópolis, en cualquier caso, parece descartado. Con un valor de mercado de 3 millones de euros según la web especializada Tranasfermarkt, en lo que influye decisivamente sus 32 años, el club bético buscará a buen seguro un traspaso por encima de esas cifras, pues aún restan por amortizar seis millones de euros de los 28 en los que se acordó su fichaje procedente del Espanyol en 2019. Su alto salario, a su vez, resulta también un problema para poder articular su adquisición definitiva por parte del Celta.