Alejandro Sáez4 min lecturaHace semanas que Rafa Benítez fue destituido como entrenador del RC Celta de Vigo y nadie, en Vigo, ha podido olvidarlo aún. Pese a que Claudio Giráldez trata de darle otro aire al conjunto celeste, aunque sin acabar de conseguirlo de manera clara, ningún aficionado del Celta puede aún dejar de hablar de Benítez, cuya sombra es muy alargada en Balaídos, donde ha dejado una herencia envenenada que no afecta tan sólo al primer equipo, sino también a su cantera y, más concretamente, a su filial, el Celta Fortuna.
La derrota por 2-1 este pasado viernes en el Benito Villamarín ante el Real Betis siguen dejando al Celta en una complicadísima situación, a tan sólo tres puntos de los puestos de descenso y como un claro aspirante a luchar por la salvación hasta el último suspiro. De hecho, sus números certifican que el de la 23/24 es el peor Celta de los últimos once años, por lo que hablan por sí solos.
El miedo al descenso sigue rondando Balaídos. Por ello acabó siendo destituido un Rafa Benítez al que aguantaron hasta la saciedad, llegando un Claudio Giráldez que por ahora no acaba de dar del todo con la tecla, aunque las sensaciones son bastante más positivas. Tampoco era demasiado complicado mejorar a su predecesor, pero... ¿Será suficiente?
Esa es, precisamente, la pregunta que se hacen todos los aficionados del Celta, que temen con un descenso que puede afectar de manera directa a su filial, el cual lucha por el ascenso a Segunda división en este tramo final de la temporada.
El filial del Celta, que la pasada jornada se impuso por 4-1 al Lugo, está en puestos de 'play off' de ascenso a Segunda, colocados en la tercera posición de la tabla con 57 puntos, uno menos que el Barça Atlètic, que es segundo y al que aún tienen que enfrentarse en este final de curso. Y a cinco unidades con respecto al sexto, la Cultural Leonesa, que lucha por darle caza a la quinta y última plaza con derecho a 'play off', la que ve a cuatro puntos, en propiedad de la Ponferradina.
Lógicamente, si el Celta acaba descendiendo, el Celta Fortuna no tendría opción ninguna de ascender. Sin embargo, tal y como informa BeSoccer tras conversaciones con la RFEF, se daría la particularidad de que el filial del conjunto celeste sí tendría derecho a jugar los 'play off', aunque nunca contaría con posibilidad alguna de consumar el ascenso a Segunda división.
Según la citada información, por tanto, el rival del Celta Fortuna en los 'play off' estaría matemáticamente en la Segunda categoría del fútbol español, indiferentemente de cómo acabara la eliminatoria entre ellos. El Celta Fortuna, por tanto, tendría que clasificarse para los 'play off' y superar la primera ronda, lo que daría el premio gordo a su rival.
Sin lugar a dudas, una auténtica herencia envenenada dejada en Vigo por Rafa Benítez, quien no sólo habría encaminado al primer equipo hasta Segunda división, sino que también secaría las opciones de ascenso de su filial, tras una gran temporada al frente de Giráldez, ahora en el primer vestuario. Por si fuera poco, además supondría un desgaste en lo físico y emocional para el filial, quien, eso sí, ganaría la experiencia de unos 'play off', que siempre curte a los jóvenes talentos.