El VAR tampoco se presenta a la Copa

La ida de la semifinal de la Copa del Rey no se ha librado de la polémica arbitral, en un partido en el que Hernández Hernández debió expulsar a Reinildo Mandava y a Griezmann por sendas patadas dignas de merecer la tarjeta roja

El VAR tampoco se presenta a la Copa
La tangana posterior al partido de ida de la semifinal de Copa del Rey entre Atlético de Madrid y Athletic Club de Bilbao - Cordon Press
Francisco SalasFrancisco Salas 3 min lectura

Atlético de Madrid y Athletic Club han disputado un partido muy intenso en la ida de las semifinales de la Copa del Rey. Los visitantes han logrado una victoria por la mínima que supone la primera derrota que sufren los rojiblancos en el Civitas Metropolitano después de 26 victorias y 28 empates, en total más de un año sin perder. El gol del triunfo llegó en un penalti de Reinildo Mandava sobre Beñat Prados, en el que el mozambiqueño arrolló al canterano bilbaíno con las dos piernas, en una tarascada que si bien era una pena máxima sumamente clara, también debió suponer la expulsión del 23.

El VAR debió llamar a Hernández Hernández para que revisara el golpe, que a todas luces era para dejar con uno menos a los de Simeone en el minuto 25 de partido. No fue la única acción que pudo suponer la inferioridad para los locales. Poco después del gol, fue Antoine Griezmann el que golpeó de forma desmedida por encima del tobillo a Sancet, pero de nuevo Santiago Jaime Latre no vio nada punible desde la sala vor y el francés siguió en el verde, no así el 8 visitante, que pudo seguir jugando, pero diezmado, hasta que fue sustituido.

No fueron las únicas polémicas del videoarbitraje, que en cambio si que actuó en el descuento, cuando el el colegiado principal señaló un penalti muy claro de Yeray sobre Morata, pero que tras revisar la jugada por completo, el ariete de la selección española arrancaba la jugada en posición antirreglamentaria, anulando la pena máxima posterior. Aunque eso sí, la falta fue muy similar a una jugada anterior en la Morata llegó antes que Paredes en el centro del campo, pero estaba vez la infracción se la señalaron al punta, aunque se pudo apreciar que fue el primero en llegar. La polémica aquí es que la jugada siguió y Griezmann ya encaraba el área de Agirrezabala. Esto desató la polémica y provocó la tarjeta amarilla a Diego Pablo Simeone tras decirle al trencilla que era "muy malo". El técnico argentino ha declinado hacer ningún tipo de comentario sobre el arbitraje en rueda de prensa, incluso abandonando la misma al ser cuestionado sobre otro posible penalti de Paredes sobre Griezmann, que si bien no parece ni en la repetición que sea punible, si que ha generado mucha polémica en el estadio y en los jugadores. La tensión del partido ha afectado al encargado de impartir justicia, que hoy ha estado irregular.

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