El encuentro que el Getafe ha disputado ante el Girona ha estado marcado, además de por la gran victoria de los de José Bordalás ante los de Míchel, por lo ocurrido con el jefe de prensa de los azulones, Ignacio Ojeda. Todo ocurrió después de que el conjunto local anotara el tanto del empate, obra de Yangel Herrera, quien hizo estallar de alegría a su afición. En ese punto, tiene un protagonismo que no buscaba, como es lógico, el miembro del departamento de comunicación de los del sur de la Comunidad de Madrid.
Tal y como apunta Cope, Ojeda, tal y como reconoce él mismo, lanzó una botella desde la cabina de prensa, donde se encontraba, hacia la grada del Girona. No ha sido porque sí, ya que, de acuerdo con su versión, habría sido en respuesta a los “constantes insultos” que ha recibido por parte de algunos seguidores de la escuadra catalana, que ha dado un paso atrás en su lucha por Europa en el torneo de la regularidad. Este último punto ha sido negado por la masa social del conjunto de Míchel.
En ese momento, el suceso provocó un gran revuelo en la zona de prensa, llegando a provocar que apareciera la policía, que tomó nota de todo lo que ha ocurrido, además de identificar a Ignacio Ojeda. Por cuestiones de protocolo, se tomó la decisión de trasladarle a otra zona de Montilivi. No se va a quedar aquí el tema, porque parece que el seguidor del Girona que ha recibido el botellazo tendría la intención de denunciarle, además de que el Getafe podría tomar medidas disciplinarias contra su jefe de prensa.
Por supuesto, hay que saber cuál es la versión de Ojeda. Tal y como se ha conocido, se encuentra “muy afectado y arrepentido”. De hecho, expresa que está “pasando los peores momentos de su vida” y no se ha querido justificar por lo sucedido. El jefe de prensa, asimismo, ha querido expresar que, en ningún momento, se enfrentó a una persona mayor ni, mucho menos, fue detenido, tal y como se ha podido leer en las últimas horas.
Según su versión, tras ser situado en una cabina de prensa para seguir el partido, un seguidor local le gritó ‘gilipollas’ hasta en ocho ocasiones. Ojeda le habría dicho “no insultes, es solo fútbol”, pero este aficionado, lejos de callarse, le siguió insultando, aumentando la gravedad de sus expresiones, calificándole como ‘hijo de puta’ varias veces. Es, en este momento, cuando pierde los nervios y le tira la botella, que estaba vacía, la cual no impacta en él.
Al momento, le pide disculpas, ya que es consciente de la gravedad del acto que ha realizado. De hecho, sale de la cabina de forma inmediata y le comenta a un miembro de seguridad que ha sido él el que ha lanzado el objeto. Posteriormente, el jefe de prensa del Girona acude al lugar y le reubica en otra cabina, y, apenas 40 segundos después, tras llamar a la puerta, se encuentra con entre 15 y 20 Mossos d’Esquadra, los cuales se lo llevan al vestuario.
Tras tomarle declaración, le comentan que el jefe de seguridad del Girona afirma que no puede continuar en Montilivi, por lo que le tienen que llevar al aparcamiento. Esta versión es completada por el acta de la UCO, ya que el propio jefe de esta unidad le habría comentado a Ojeda que, en las imágenes de las cámaras de seguridad del estadio, se puede ver que se le increpa e insulta. Además, se vería cómo lanza la botella y cómo pide disculpas, siendo totalmente consciente de lo sucedido.