Fiasco histórico del Liverpool en la FA Cup

El equipo dirigido por Arne Slot vivió un auténtico desastre en la FA Cup al caer eliminado por el Plymouth Argyle, último clasificado de la segunda división inglesa. Un solitario gol de penalti de Ryan Hardie fue suficiente para sellar una de las mayores sorpresas del torneo.

Un resultado inesperado para la historia

El 9 de febrero de 2025 será una fecha imborrable para los aficionados del Plymouth Argyle y para la historia de la FA Cup. Nadie imaginaba que el Liverpool, un equipo que venía dominando tanto en Inglaterra como en Europa con autoridad, quedaría fuera en los dieciseisavos de final ante el conjunto más débil de la Championship.

Este resultado se suma a la larga lista de episodios memorables que han hecho de la FA Cup un torneo especial, donde los pequeños pueden derribar gigantes. El Plymouth, que apenas había conseguido siete triunfos en toda la temporada y ocupa el último puesto de la segunda categoría del fútbol inglés, ya había dado la sorpresa al eliminar al Brentford de la Premier League en la ronda anterior. Pero lo del domingo fue un paso más allá: vencer a un Liverpool que lidera la liga con comodidad y es un firme candidato en la Champions League.

Un golpe duro para un Liverpool dominante

El Liverpool ha sido el equipo más regular de la Premier League esta temporada, sumando 53 puntos en 23 jornadas, con un partido menos que sus rivales directos. Su ataque, con 56 goles, es el más efectivo del campeonato, mientras que su defensa, con solo 21 tantos en contra, es la más sólida. En la Champions League, su rendimiento ha sido igualmente impresionante, terminando la fase de grupos con siete victorias y solo una derrota en un encuentro intrascendente contra el PSV Eindhoven.

A pesar de esta campaña sobresaliente, los 'Reds' ahora tendrán que cargar con la mancha de esta inesperada eliminación ante un equipo que lucha por no descender a la tercera división.

Las rotaciones de Slot pasaron factura

Apenas tres días después de golear al Tottenham y asegurar su pase a la final de la Copa de la Liga, Arne Slot decidió hacer varias modificaciones en su once inicial. Apostó por incluir a los jóvenes Nyoni y McConnell, dejando en el banquillo a figuras como Darwin Núñez y Curtis Jones. Aunque Jota y Luis Díaz encabezaban el ataque, la ausencia de Salah y la falta de rodaje de algunos jugadores pesaron en el rendimiento del equipo.

El encuentro comenzó con un contratiempo para el Liverpool: a los diez minutos, Joe Gomez, capitán del equipo en esta ocasión, tuvo que abandonar el campo por lesión. A partir de ahí, el equipo nunca logró encontrar su mejor versión.

Desde su llegada a Anfield, Slot había implementado un estilo ofensivo y dinámico que había hecho olvidar la salida de Jürgen Klopp, al menos en lo futbolístico, porque la huella del alemán en el club es imborrable. Sin embargo, el técnico neerlandés subestimó al rival y pagó las consecuencias ante un más que digno rival.