Corberán cumple un año en el Valencia: de héroe de la salvación a los fantasmas del pasado
El técnico del Valencia llegó al banquillo de Mestalla el 25 de diciembre de 2024, cogiendo al equipo colista y salvándolo holgadamente hasta llegar a soñar con Europa, aunque esta temporada ha vuelto a aparecer la sombra del descenso

El entrenador valenciano Carlos Corberán cumple este 25 de diciembre su primer año al frente del Valencia, en un periodo que comenzó con una llegada de urgencia para rescatar a un equipo desahuciado y que ahora ha vuelto a la parte baja de la clasificación, aunque con el recuerdo aún reciente, y su consecuente rédito, de una salvación que rozó lo milagroso.
El club anunció su incorporación a la 1:42 de la madrugada del día de Navidad de 2024, en un movimiento tan inesperado como necesario. El técnico de Cheste asumió el mando de un Valencia de Rubén Baraja hundido y sin casi señales de reacción.
En apenas cinco meses, transformó el equipo: reconstruyó anímicamente al vestuario, dio al equipo una identidad reconocible, sacó la mejor versión de los jugadores y condujo a los blanquinegros hasta una cómoda duodécima posición con 46 puntos.

La permanencia quedó certificada con tres jornadas de antelación gracias a una segunda vuelta de auténtico nivel europeo. El equipo sumó 34 puntos en 21 partidos (nueve victorias, siete empates y solo cinco derrotas) y llegó a encadenar nueve encuentros sin perder, hasta el punto de tener opciones matemáticas de pelear por la octava plaza y el acceso a la Conference League.
Aquel impulso convirtió a Corberán, hasta entonces un técnico prácticamente desconocido para la afición valencianista, en el arquitecto de una salvación que parecía improbable. Sin embargo, el nuevo curso ha devuelto cierta inquietud a Mestalla.
El Valencia cierra el año natural con 16 puntos, cuatro más que en el mismo tramo de la temporada anterior, cuando la crisis desembocó en la destitución de Rubén Baraja, que no pudo volver a salvar al equipo como lo hizo en la temporada 2023-2024.
El balance actual refleja tres victorias —todas en casa—, siete empates y siete derrotas, entre ellas una dura goleada ante el Barcelona (6-0) que recordó los tropiezos más severos del curso pasado, uno de los puntos débiles del ciclo de Corberán. Al equipo le sigue costando sumar lejos de Mestalla y, además, ha perdido parte de la solidez como local que fue clave en la lucha por la permanencia.

Mientras, en la Copa del Rey el Valencia ha alcanzado los octavos de final tras superar al Maracena, al Cartagena y al Sporting de Gijón. El primer año de Corberán queda marcado por los extremos: del rescate heroico a la necesidad de volver a remar para que no vuelvan los fantasmas del pasado.
EFE