El as en la manga de Aston Martin y Fernando Alonso a por la 33

El asturiano busca su victoria número 33 de la mano de Aston Martin... y de la petrolera saudí Aramco

El as en la manga de Aston Martin y Fernando Alonso a por la 33
Fernando Alonso, en su AMR23. - Aston Martin

Aston Martin y el fenómeno Alonso... Y la petrolera saudí Aramco. El as en la manga de la escudería que pilota Fernando Alonso en el Mundial de F1. Una inversión por parte de la petrolera de 647 millones de euros que ha propiciado ya, de antemano, que el AMR23 asombre en los test de pretemporada. La número 33, la victoria que persigue Fernando Alonso, está de moda.

Cuando el 1 de agosto de 2022 Alonso y Aston Martin hicieron oficial su vínculo desde esta temporada, el equipo británico ocupaba la novena posición (de diez) en la clasificación de constructores de la F1. Siete meses después, Aston Martin ha pasado a ser uno de los equipos a tener en cuenta para la temporada 2023 que arranca en Bahrein, un circuito en el que durante los test fueron, según datos de la propia F1, 2,371 segundos más rápidos que en el mismo escenario un año antes. Un progreso que el propio Alonso, tras reconocer que es solo la pretemporada, ponderó en una comparecencia pública: El último día, en nuestra simulación de carrera, fuimos ligeramente más rápidos que Ferrari". Y los italianos fueron segundos en el mundial de constructores la pasada temporada.

Un proyecto que nació en 2018 cuando el equipo de F1 Force India entró en concurso de acreedores a mitad de temporada. El magnate canadiense Lawrence Stroll compró el equipo, saldó su deuda, colocó a su hijo, Lance, como piloto y empezó a poner los cimientos de lo que es hoy el equipo. El paso definitivo fue la adquisición de un 18,3% de la marca de coches Aston Martin, aprovechándose también del momento de dificultad que atravesaba la compañía británica, lo que le permitían poner el nombre de Aston Martin al extinto Force India que por entonces se llamaba Racing Point. Y de la mano, una subida en bolsa de Aston Martin del 25%.Una operación que hizo que Aston Martin subiera un 25% en bolsa.

Lawrence Stroll amasó su fortuna con diferentes inversiones en marcas de ropa de lujo y es un apasionado de los coches. Su patrimonio, según Forbes, es de 2.944 millones de euros. Por ello, ha hecho de su pasión su gran inversión. En un proyecto al que no habría sido posible atraer a Fernando Alonso sin la apuesta de Arabia Saudí por Aston Martin. Y es que la marca británica tiene como patrocinador principal a la petrolera Saudí Aramco, que también patrocina a la F1. Una asociación que ha pasado de ser un mero patrocinio a estar involucrado, a través de inversión, en el ambicioso proyecto de la marca.

"La asociación refleja el compromiso de Aramco con la visión, la determinación y las capacidades del equipo de dirección y de competición de Aston Martin para impulsar el progreso continuo y lograr el éxito en la F1", reconoció a EFE Talal Al-Marri, director general de asuntos públicos de Aramco. Empresa gestionada por el gobierno Arabia Saudí, país del que el Fondo de Inversión Pública (PIF), dirigido por el príncipe heredero, Mohammed bin Salman, compró el 16,7% de Aston Martin en julio de 2022 además de aportar una inyección de capital de 647 millones de euros, según medios especializados. Movimiento que tuvo, de nuevo, un buen impacto en bolsa, ya que las acciones de la marca británica subieron un 20%.

Así, el país saudí es el segundo máximo accionista de una Aston Martin que ha cambiado su paradigma y cada vez reúne a más marcas. Su coche está lleno de patrocinios en una F1 que cotiza al alza. Además de sus dos socios principales, cuentan con otras 24 marcas que han querido asociarse a Aston Martin. Un banco, una empresa de grúas, gafas de sol, seguros, redes sociales... el proyecto despierta interés, y no sólo sobre los circuitos.

EFE / OMB