Max Verstappen cuestiona el control aleatorio de la FIA: ''Media parrilla sería excluida''

El neerlandés ha señalado directamente el sistema de controles técnicos de la Fórmula 1 tras quedarse a las puertas de una remontada histórica por el título, cuestionado su aleatoriedad, aunque sabe que si es imposible de realizar por razones de logística y tiempo

Max Verstappen cuestiona el control aleatorio de la FIA: ''Media parrilla sería excluida''
Max Verstappen ve injustas las inspecciones aleatorias de la FIA - Cordon Press

Max Vestappen podría haberse hecho este año con su quinto título consecutivo del Campeonato de Pilotos. Pero hizo historia de otra forma, pasando en un tiempo récord de estar a 104 puntos de desventaja a finalizar la temporada rozando con la punta de los dedos el título, del que se quedó a tan solo dos puntos. El piloto neerlandés ha querido hablar sobre las inspecciones de la FIA al azar, que tienen el objetivo de comprobar que los monoplazas cumplen el reglamento.

Verstappen cree que habría más descalificaciones

Si algo ha destacado siempre del cuatro veces campeón es que si tiene que decir algo, lo hace sin pelos en la lengua. En el medio Viaplay, Verstappen ha sido claro: si la FIA revisase todos los coche, habría descalificaciones en cada carrera. Aunque también es cierto que es físicamente imposible someter a los veinte monoplazas a revisiones a fondo, lo que lo deja todo a merced del azar.

''Si se controlan a fondo todos los coches tras un GP, seguramente la mitad de parrilla acabaría excluida. Todos los equipos buscan el límite de las reglas e incluso pueden ir un poco más allá'', comentaba el de Red Bull, explicando que es ya que las escudería intentan ir lo más a ras de suelo posible: ''Todos los equipos buscamos el límite, es lo que intentamos siempre... y en alguna ocasión te pasas porque no todo está bajo control''. Aclara también: ''No me gusta que el control sea aleatorio, me gustaría que fuese para todos los coches, pero entiendo que esto no es posible''.

Las revisiones de la FIA

No es casualidad que estas sean aleatorias, tal y como dio una pincelada Max Verstappen. Las razones son principalmente logísticas y estratégicas, ya que revisar 20 coches pieza a pieza al acabar una carrera lleva su tiempo. Teniendo en cuenta el contrarreloj que es el mundo de la Fórmula 1, los coches deben ser desmontados y enviados al siguiente destino, por lo que el tiempo no juega a su favor. Además, una revisión exhaustiva, llamada deep dive, implica que se desmonten componentes internos pesados, comparando piezas físicas con archivos CAD, que podría tomar días si la intención es hacerlo en toda la parrilla.

Este método de revisiones aleatorias hace sus veces de un efecto disuasorio, ya que las escuderías no saben que coche o que área específica será revisada, más allá de los controles estándar de combustible y peso. Esto hace que los equipos no se arriesguen a incumplir el reglamento ya que nunca se sabe cuando les puede tocar. Cualquier infracción, por pequeña que sea, suele conllevar la descalificación, lo que hace que el riesgo no merezca la pena. Su misión es mantener y garantizar la equidad, alejar los favoritismos y cumplir lo que marca el complejo Reglamento Técnico de la F1.