Una nueva tormenta azota McLaren
Piastri cedió a Norris tras la mala parada del británico, pero el precedente abre interrogantes sobre el futuro del campeonato
El GP de Italia dejó una situación que podría marcar un antes y un después en la relación entre Oscar Piastri y Lando Norris. El australiano lideraba la carrera con comodidad, gestionando neumáticos y estrategias como solo un líder de Mundial puede hacerlo. Sin embargo, tras una parada especialmente lenta del británico, McLaren decidió adelantar la parada de Piastri. La situación se complicó cuando la rueda delantera izquierda de Norris quedó atascada, consumando el ‘undercut’. Ante este imprevisto, el equipo pidió a Piastri que cediera la posición a su compañero, asegurando así la estrategia global y evitando que un fallo aislado decidiera la clasificación general.
Descontento dentro del garaje
Pese a acatar la orden, Piastri no ocultó su malestar por radio: “Dijimos que una mala parada era parte de las carreras”, señaló el piloto. Más tarde matizó: “Hablamos de muchos escenarios posibles cuando estás en el mismo equipo. Hay cosas que se escapan al control del piloto y muchas maneras de rectificarlo. Esto se revisará, pero no fue algo inesperado”. Norris, por su parte, defendió la decisión y aseguró que estaba dentro del acuerdo del equipo: “Solo se aplicó porque no había otros coches involucrados. Cuando hay más rivales alrededor, estas intervenciones no se podrían dar sin riesgos. El equipo debe tomar decisiones, y está dentro de su control”.
La situación pone de manifiesto un delicado equilibrio interno: Piastri lidera el Mundial con 31 puntos de ventaja sobre Norris, pero decisiones como esta pueden tensar la relación entre ambos y abrir debates sobre la gestión de órdenes en un campeonato tan ajustado.
Principios y consistencia, la justificación de McLaren
Andrea Stella, jefe de la escudería, defendió la medida con firmeza: “No es solo ser justos, también hay que ser consistentes con nuestros principios. Independientemente de cómo vaya el campeonato, debemos ser firmes con los valores de McLaren”. Stella detalló la lógica estratégica detrás de la decisión: “Paramos a Oscar primero y luego a Lando con la intención de cubrirnos frente a Leclerc y mantener opciones en caso de bandera roja o coche de seguridad. La prioridad era proteger los puntos del equipo y mantener la competitividad”.
El antecedente abre un debate crucial: McLaren deja claro que no temerá intervenir en futuras carreras para proteger los intereses del equipo, pero esto genera tensiones internas que deberán manejar con cuidado. A medida que el Mundial entra en su fase decisiva, la manera en que se gestionen estas órdenes podría influir directamente en la relación entre Piastri y Norris, así como en la estrategia general del equipo frente a rivales como Red Bull o Ferrari.
Con tres puntos de ventaja para Norris sobre Piastri al final del GP de Italia, McLaren ha lanzado un mensaje: la consistencia y la estrategia del equipo priman sobre la emoción de la pista, y cualquier error, por pequeño que sea, puede ser corregido a costa de las jerarquías individuales. Ahora queda por ver cómo responderán los pilotos en las próximas ocho carreras, donde la tensión será máxima y cualquier decisión estratégica podrá marcar el desenlace del campeonato.