Jorge Martín se lleva su último escarmiento del año

Más alto lo ha podido decir, pero más claro no. Jorge Martín se baja totalmente de la pelea por intentar decorar su nefasta primera temporada en Aprilia. Las graves lesiones sufridas antes y durante este Mundial y su última caída en Austria le han hecho tomar una decisión definitiva.

El piloto madrileño, en la previa del certamen de Hungría, que ha vuelto al calendario tras 33 años de ausencia, ha confesado que saltará a Balaton Park con una mentalidad totalmente diferente a la mostrada desde que participa en la categoría reina.

Y es que el campeón del mundo no entiende de otra cosa que no sea luchar por un triunfo. Y menos después de coronarse el curso pasado. Pero el último susto que se ha llevado le ha servido de escarmiento para asumir que este curso ya está perdido y que debe mirar por su salud antes que por otra cosa.

Y en su última comparecencia mediática así se lo ha hecho saber a todo el equipo de Aprilia, por si con alguno no había hablado estos días: "Llego bien. Estos días me han servido para recuperarme un poco de la caída de Austria, que tenía un poco de dolor en el brazo. Aún tengo hematomas, pero nada que me impida pilotar al 100 por 100. También he reflexionado un poco estos días sobre mi situación, sobre la caída, sobre cómo me tengo que tomar los dos o tres próximos fines de semana, y tengo las cosas un poco más claras".

En este sentido, 'Martinator' profundizó a continuación en dicha lección aprendida: "Es importante entender mi situación, que vengo a competir con los mejores pilotos del mundo después de 12 o 13 carreras, y llego tras una lesión muy, muy grave. Y tengo que saber que a veces hay días mejores, en los que podré estar delante, y días peores, en los que tendré que saber acabar 12º. Aprender eso después de ganar no es fácil. Pero hay que entender que tengo que enfocarme en mi proceso, no compararme con otros pilotos por el momento, y ver de verdad qué necesito para ser más rápido a largo plazo".

Sobre el Gran Premio disputado en Austria el pasado fin de semana, Jorge considera que planificó bien todos los días del certamen: "Creo que la gestión del fin de semana en Austria fue buena. En la sprint, remonté y me encontraba muy bien. Quizás el problema fue que puse demasiadas expectativas en el domingo. Pensé que si me ponía entre los 8 primeros, ya tendría el ritmo para estar en el Top 6. Y es hacer más de lo que me toca ahora mismo. Esa es la reflexión: no tengo que hacer más de lo que me toca. Si me encuentro bien, voy a ir para adelante. Si no, pues a llegar a meta y cogiendo experiencia con la moto".

Por último, ha analizado el próximo trazado, el de un Balaton Park desconocido para todos. Algo que él ve beneficioso para los que no son favoritos a estas alturas del campeonato. "Como decía, no me voy a enfocar en resultados. Si miro resultados, es una ventaja. Yo soy un piloto que me adapto muy rápido a pistas nuevas, lo tengo muy claro. Es verdad que sin conocer la moto, no sé. Creo que para mí es una ventaja porque llego sin ninguna referencia de la Ducati".