La emotiva despedida de Vaclik, que se acuerda de Caparrós, Gallardo y Marchena

Fernando RuizFernando Ruiz 4 min lectura
Tomas Vaclik, portero del Sevilla Fútbol Club, se ha despedido esta mañana del que ha sido su equipo durante las tres últimas temporadas. Acompañado por el presidente José Castro y el director deportivo Monchi.

El mandamás nervionense ha agradecido los servicios prestados y le ha deseado suerte en su futuro, así como Monchi, que le ha dedicado unas bonitas palabras. "Es la primera vez que despido a un jugador que no he contratado, aunque si hubiera estado como director deportivo en ese momento lo hubiera contratado. Con Tomas me une la profesión de portero y sé lo ingrato que es ese puesto. Tiene muchos sinsabores y pocas alegrías y más cuando no juegas tanto. Y ahí Tomas ha tenido un magnífico comportamiento y eso es digno de mención", ha dicho Monchi.

El gaditano le deseó la mejor de las suertes en el futuro: "A veces el director deportivo tiene que tomar decisiones que van en contra de su forma de ser, le deseo que siga rindiendo a ese magnífico nivel, que ojalá nos podamos encontrar en el futuro porque le queda cuerda para rato y lo veremos mucho tiempo defendiendo la portería".

Tras las palabras de Monchi, Lopetegui también ha tenido unas palabras a través de un vídeo puesto que no ha podido asistir a su despedida ya que no estaba en Sevilla. El Sevilla FC también le ha dedicado un bonito vídeo con sus mejores intervenciones a lo largo de estas tres temporadas en el que no ha podido evitar las lágrimas.

El checo se tomó su tiempo para beber agua, resoplar y enjugar las lágrimas antes de hablar: "Buenas tardes a todos, muchas gracias por venir y gracias por este vídeo, estoy muy emocionado. Hoy vuelvo a esta sala de prensa para despedirme del Sevilla FC tres años después de mi presentación. El tiempo pasa muy rápido y parece que fue ayer cuando llegué a este gran club. Puedo decir que me marcho lleno de orgullo por una experiencia única, con los objetivos cumplidos y una Europa League. Gracias en mayúsculas a toda la afición sevillista, que desde el principio me ha hecho sentir como un hijo. Gracias al presidente y el consejo de administración, gracias a mis compañeros, fue un gran placer jugar y trabajar con vosotros. Gracias a los dos cuerpos técnicos que he tenido y gracias a todos los empleados del club con los que he tratado día a día en estos tres años".

"Las entidades son grandes por la personas que la conforman y la calidad humana del Sevilla es muy grande, no quiero entrar en nombre porque me olvidaría de algunos pero quiero recordar especialmente a Joaquín Caparrós, Carlos Marchena y Paco Gallardo que apostaron por mí, y a José Silva, mi entrenador de porteros, que me ha hecho crecer en lo personal y en lo profesional. He vivido momentos increíbles, no los voy a olvidar porque es imposible. El día que ganamos al Madrid después de haber pasado toda la noche en el hospital por el accidente de mi hija. La espina que me llevo es no haberme podido despedir con toda la afición. Cuando llegué me dijeron que esta ciudad tiene un color especial y es verdad, mi familia y yo hemos sido muy felices. El Sevilla FC es parte de mi vida porque parte parte de mi corazón se queda aquí. Fue un honor jugar aquí, muchas gracias a todos".
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