Carlos Alcaraz se lo empieza a creer

Tras su exhibición contra Cameron Norrie, Carlos Alcaraz ya empieza a estar al máximo para ir a por su tercer Wimbledon, tanto que cuando le han preguntado por como considera que está su juego, no se ha cortado al valorarlo

Carlos Alcaraz se lo empieza a creer
Carlos Alcaraz en Wimbledon 2025 - Cordon Press

Increíble. Ese es el adjetivo con el que Carlos Alcaraz ha definido su partido en los cuartos de final de Wimbledon ante Cameron Norrie, donde ha pasado por encima del británico con un juego casi perfecto, sin conceder oportunidades y puliendo los errores que le habían lastrado en las rondas previas. Así va a llegar crecido a las semifinales, que serán este viernes, por lo que va a tener hasta tres días para descansar antes de medirse al quinto favorito, un Taylor Fritz que viene jugando de maravilla y ya va a obligarle a subir, si es es que posible, aún más el nivel.

Si tiene que valorar lo que ha hecho tiene claro que ha sido "un gran partido", el mejor del torneo para él, y por eso mismo, tal y como explicó en rueda de prensa tras el duelo, está exultante de cara a lo que viene. "Estoy muy contento de verme mejorar y de seguir tras cada partido. Voy a aprovechar lo máximo estos dos días ahora y luego a por otra semifinal de Wimbledon".

Sobresaliente

Si tiene que calificar su participación, se pondría "una nota muy alta", pese a que el nivel de su rival era mejorable. "Hay jugadores que te dejan más margen y me he sentido muy cómodo. El adjetivo es 'increíble'. Eso lo define bastante bien". No obstante, saber que también ha habido algunos errores, algunas cosas que quizás haya hecho peor e incluso, algunos momentos en el partido que haya fallado ciertas cosas que se pueden mejorar, pero va por el buen camino. "Un partido perfecto es casi imposible, siempre va a haber errores que bajas la concentración, intentamos quitarnos errores tontos, pero ha sido en general muy completo".

Por destacar algo es que se está moviendo muy bien y el cuerpo le está respetando. Más allá de la pequeña molestia que sintió antes de medirse a Rublev, está teniendo pocos problemas, prácticamente ninguno, lo que le motiva de cara a lo que le espera a partir de ahora. "Me da mucha confianza para lo que viene, para moverte de una manera natural. Afronto los partidos de una manera personal, enfocado en mí. No es muy distinta a cómo puedo afrontar los partidos en otra superficie. Tratamos de no pensar mucho en el rival". Pero los rivales van a ser de gran importancia, ya sea Fritz este viernes, como si le gana, cualquiera de los que hay en el otro lado del cuadro, destacando especialmente a Sinner y Djokovic.