Carlos Alcaraz le da trabajo a un tenista olvidado

Con su sexto Grand Slam conquistado en el US Open, Carlos Alcaraz levantó la mano y pidió un respiro en su calendario. España y su capitán, David Ferrer, lamentaron durante unas horas su ausencia en la próxima eliminatoria de la Copa Davis. Pero rápidamente el nombre del elegido sonó con fuerza: Pablo Carreño.

El gijonés será el encargado de sumar para el equipo español ante el número uno danés, Holger Rune. Y lejos de agobiarle la presión, el asturiano se ha mostrado muy ilusionado en una entrevista en puntodebreak.com con volver a sentirse líder otra vez: "Es un momento para disfrutar. Vuelvo a estar en la Selección: después de todo lo que he pasado, para mí es muy importante verme otra vez aquí. El capitán ha confiado en mí, cree que puedo sacar adelante este partido. Obviamente va a ser muy complicado, ya que el rival es un rival muy potente, pero es una competición diferente, la Copa Davis siempre es especial. Es muy importante contar con el apoyo del público y jugar en casa, vamos a intentar sacar adelante este partido".

En este mismo sentido, se muestra feliz de que la competición haya recuperado su formato habitual: "Esto lo echaba muchísimo de menos, la verdad. No me acuerdo cuándo fue la última eliminatoria así, bajo este formato, que jugué".

Y para los que piensan que sin las primeras espadas del tenis español (Carlos Alcaraz, Alejandro Davidovich y Marcel Granollers), el pase está complicado, ha mandado un mensaje contundente: "Creo que somos unos privilegiados. España es un país que tiene muchos jugadores de muy buen nivel. A cualquier otro equipo le quitas el número uno, el número dos y su número uno de dobles... y prácticamente no puede ni venir a competir. Nosotros, al final, estamos viniendo con jugadores como Jaume, que está 40 del mundo y viene de hacer cuarta ronda en US Open; Pedro, que también ha estado ahí; Carballés, que ha ganado títulos ATP... creo que tenemos mucho fondo de armario. Está claro que no somos Carlos Alcaraz todos, pero creo que podemos competir y sacar la eliminatoria adelante, que va a costar, claro, pero estamos de sobra capacitados".

Por último, tiene claro a quién le dedicará el triunfo si se produjera, a su hijo recién nacido. Su vida ha cambiado y su motivación ha crecido: "Cambian cosas. No te voy a decir que dentro de la pista cambien... pero fuera de la pista, créeme, cambian muchas cosas (risas). Está aquí mi hijo, ha venido esta semana. Mi mujer también, y además tenemos la ayuda de la madre mi mujer, que se va a quedar estas noches con él para que yo pueda estar al 100% de cara a los partidos del sábado y del domingo. Es una muy bonita motivación, la verdad es que sí".