Fonseca sobrevive al gran cañonero francés en Basilea
Joao Fonseca ha conseguido una victoria de mucho peso en su estreno en el ATP 500 de Basilea, superando al vigente campeón del evento, el francés Giovanni Mpetshi-Perricard
En la búsqueda de la gran joya de la ATP en estos momentos en los que el tenis demanda una nueva ilusión para tratar de pelear contra Carlos Alcaraz y Jannik Sinner hay un nombre que destaca por encima del resto, el de Joao Fonseca. El jovencísimo carioca, de apenas 19 años, está en su primer año en la élite, pero no termina de adaptarse del todo al máximo nivel, o al menos al olimpo al que parecía estar predestinado. No obstante, se dio de baja de la gira asiática para centrarse en los torneos de final de temporada bajo techo por Europa, y tras un muy mal inicio, en el torneo de Basilea las cosas han comenzado algo mejor para él.
El brasileño, número 46 del mundo, tenía un durísimo rival para su estreno en la figura del francés Mpetshi Perricard, vigente campeón del evento, y que en estas pistas tan rápidas es sumamente peligroso. No obstante, el galo tenía la responsabilidad de que si perdía iba a dejar escapar tantísimos puntos que caería del top 50 de la ATP, como así ha sido. Al final el partido se ha resultado en dos sets para el Río, por un marcador de 7-6 y 6-3, y se enfrentará en octavos de final al checo Jakub Mensik, 19º del circuito, en un duelo entre los dos mejores jóvenes de la ATP en este momento, como refleja la 'race' a las ATP Next Gent Finals.
Un Fonseca crecido
El joven tenista de 19 años viene de caer en la primera ronda del ATP 250 de Bruselas ante el neerlandés Botic Van de Zandschulp, y no vive su mejor momento en un circuito en el que aún no ha encontrado la regularidad. En el primer set solventó sin problemas sus juegos al servicio, al igual que Perricard, ya que ninguno de los dos forzó ninguna bola de rotura. Tuvo que llegar el 'tie break' para deshacer la igualdad, y fue el brasileño el que se impuso por la mínima, 8-6.
La dinámica y los ánimos le permitieron a Fonseca ponerse 3-0 arriba en la segunda manga, ante un francés debilitado y con menos energías después de dejar escapar un saque, lo que le suele generar un problema por su debilidad al resto. Se le hizo cuesta arriba defender su servicio mientras que el de Río de Janeiro se mantuvo firme hasta el final y cerró el set con un 6-3, sin conceder ni siquiera una bola de 'break para citarse con Mensik.