Más vale tarde que nunca para Sasha Zverev
Alexander Zverev ha logrado el pase a los octavos de final del Masters 1000 de Cincinnati tras batir a Brandon Nakashima en el partido suspendido por la lluvia en la jornada del martes

Más vale tarde que nunca, o eso es lo que debe pensar Alexander Zverev, que este martes se quedó a muy muy poco de cerrar su partido de dieciseisavos de final del Masters 1000 de Cincinnati ante Brandon Nakashima. La jornada fue una total agonía, pues estuvo marcada por el calor asfixiante, que se cobró -y se cobra- varias víctimas entre los grandes de la ATP, y una lluvia inesperada y muy fuerte. Tal fue la violencia de la descarga que acabó suspendiendo la jornada a medias. Hubo partidos, como el Shelton-Bautista, que no llegaron a arrancar, y otros como el del alemán y el yankee, que se quedaron apenas a un juego de decidirse.
Y es que cuando no se pudo jugar más, el marcador mostraba un 6-4 y 5-4 para el de Hamburgo que dejaba muy claro que salvo sorpresa mayúscula, la victoria debía ser para el número 3 del mundo. Y sí, pese a la tardanza y a las dificultades varias, así ha sido. Zverev ha saltado a la pista en la mañana de Ohio y no ha dado la más mínima opción al local. Un juego al saque decidido por la vía rápida, para, al primer punto de partido, certificar el pase a los octavos de final, donde ahí le va a subir el nivel. En ellos se va a medir al 14º cabeza de serie, que no es otro que Karen Khachanov. El ruso es peligrosísimo en este tipo de pistas y además llega crecido tras llegar a la final en Toronto, aunque eso sí, cansado tras tanta carga de minutos en pista.
Un drama para Pegula
A la que le han ido mucho peor las cosas es a una jugadora que defendía la final lograda el año pasado como Jessica Pegula. La de Buffalo cimentó su ascenso en el ranking en este tramo norteamericano del curso pasado, sin embargo, en 2025 ha llegado en una forma mucho menos superlativa, lo que se ha traducido indudablemente en derrotas.

En Cincy tenía un hueso durísimo en los octavos de final ante Magda Linette, y la polaca ha respondido a lo grande, jugando con una solvencia inesperada y sobre todo, adaptándose mucho mejor a tener que jugar un mini partido a un set después de se cancelara este martes por la lluvia cuando cada una había conquistado uno. Al final, un marcador de 7-6, 3-6 y 6-3 tiene la culpa de que la europea vaya a pisar los octavos de final.