Sara Sorribes da un paso de gigante para España

La Billie Jean King Cup ha comenzado su edición de 2025 en el que cambia el formato y donde esta vez España lo va a pasar peor para disputar la final, que tendrá lugar en China tras varios años siendo anfitrionas. Para poder encararse al evento tiene que superar la fase de grupos, en la que se enfrenta esta semana a Brasil y a la República Checa en tierras checas. Precisamente las locales están siendo el primer rival de las nuestras y por lo pronto la cosa ha comenzado bien, con un grandísimo y trabajado triunfo de la número 2 española, Sara Sorribes.

Sara Sorribes puso por delante a España en el duelo de la la segunda jornada del Grupo B de los clasificatorios que se disputa en Ostrava. En el debut de Carla Suárez como capitana del conjunto español, Sorribes superó a Laura Pigossi, por 6-3 y 7-5, y dio el primer punto a España en el enfrentamiento, que empieza y acaba este viernes. No había enfrentamientos previos entre Sara y Pigossi, ubicada en el puesto 182 del ránking WTA, y se notó, pues las dos jugaron muy tácticamente, buscando aprovechar sus oportunidades y no regalar nada. Pero la española cerró el triunfo en una hora y dieciocho minutos.

A continuación, disputarán el segundo punto de la jornada las dos números uno de sus respectivos equipos. Jessica Bouzas, que está ocupando el puesto que debería ser sobre el papel para Paula Badosa, pero la lesión que sufre en la espalda la catalana, va a obligar a la joven gallega a asumir el mando en el que será su estreno vistiendo la rojigualda. Y lo hará ante Beatriz Haddad Maia, decimoséptima de la clasificación Mundial.

El comodín del dobles

Posteriormente, está previsto el duelo de dobles entre Sara Sorribes y Cristina Bucsa contra Luisia Stefani y Beatriz Haddad Maia. Si España redondea su triunfo dejará sin opciones a Brasil que el jueves perdió claramente contra el anfitrión. Por lo que el sábado, el equipo español y el cuadro checo se disputarían la clasificación para la fase final. Ese duelo será clave, pues solo el primero accederá a las Finales que se jugarán en septiembre en la ciudad china de Shenzhen. Estar un año más en las finales sería un gran salto para el tenis femenino español, que necesita nuevas motivaciones tras una época muy irregular, más allá de la gran Badosa y de algunas actuaciones puntuales del resto.