El Real Madrid se topa con su fichaje deseado: "Entendía que no era lo mejor para mí"

Unicaja tratará de frustrar una vez más al Real Madrid en el mejor momento desde que llegó a España su gran estrella, el dominicano Chis Duarte

El Real Madrid se topa con su fichaje deseado: "Entendía que no era lo mejor para mí"
Duarte, en su duelo de pretemporada ante el Real Madrid - @unicajaCB

El Real Madrid empezaba este viernes un maratón de partidos de alto nivel que en apenas nueve días le harán jugarse el liderato de la ACB, su continuidad entre los diez primeros de la Euroliga y un clásico ante el Barça que puede marcar el futuro, no tanto porque sea decisivo en la clasificación liguera entre ambos, sino porque es el primero con Xavi Pascual después de haber ganado todos los que jugó ante Joan Peñarroya.

Si ante el Mónaco se perdió en un partido en el que el Madrid acabó "muy tocado", según Sergio Scariolo, el segundo de esa serie es frente a un Unicaja que le ha complicado la vida mucho en los últimos tiempos, le ha ganado títulos y le ha puesto contra las cuerdas en 'play offs'. Este año llega muy renovado y en proceso de adaptación, lo que le ha hecho más 'vulnerable', pero también con una estrella que quisieron los blancos y que, finalmente, se decantó por el club malagueño.

Chris Duarte ha tardado en arrancar, pero ya parece haber completado ese proceso y llega al Movistar Arena después de haber sido elegido MVP de la ACB por primera vez. "Hubo algo -con el Madrid-. Tuve un montón de ofertas. Una de ellas era del Madrid, pero entendía que lo mejor para mí era venir a Málaga y así lo decidí", asegura el dominicano en una entrevista con AS, donde confirma que el equipo blanco ya le quiso fichar en edad de formación, con 17 años. "En aquel momento, cuando la NCAA no me acepta, vinieron ofertas de Europa, de Argentina... Pero decidí irme a Northwest Florida State College. No tenía mucho conocimiento de la competición europea en aquel entonces y sentía que mi oportunidad estaba en Estados Unidos", añade Duarte.

La estrella de la selección dominicana se enfrenta a su compañero Andrés Feliz, con el que había hablado de ese salto a Europa, aunque también reconoce que en principio no creyó que fuese tan complejo. "Esperaba llegar y ser una amenaza desde el día uno, hacer mis cosas desde el primer día. Pero las cosas no salieron así. Es un proceso, el cual me senté y lo admití. Un proceso al que me tengo que adaptar, junto con los compañeros, Ibon -Navarro- y el cuerpo técnico. Todos. Y no solo dentro de la cancha, también fuera", reconoce.

Europa, muy diferente a la NBA

"Estoy bien gracias a Dios. Cuando vienes a Europa, con cosas tan diferentes, es como empezar de cero a nivel mental, físico, táctico... Todo lleva un tiempo. En Estados Unidos hay unos códigos diferentes porque el negocio es mucho más grande. Hay jugadores que cobran 200 millones de dólares y hacen cosas diferentes a las tuyas. Aquí tenemos la suerte de que nos llevamos bien entre todos", afirma el jugador centroamericano sobre las diferencias que se ha encontrado con respecto a lo que conocía de la NBA y lo que está pudiendo ver en la ACB.

De su paso de la NBA sólo quiere recordar que fue una etapa necesaria para llegar hasta ésta. "En la NBA tuve muchos momentos buenos y muchos momentos malos. Sinceramente, mi mentalidad y el concepto de la NBA cambió tras jugar allí. Es algo muy diferente a lo que pensaba cuando estaba en college o en República Dominicana. Hubo algunas situaciones donde acabé decepcionado porque veía cosas que para mí eran injustas. Obviamente, hay cosas que yo no podía controlar, pero estoy totalmente agradecido por la oportunidad que se me dio allí. Ser elegido por los Indiana Pacers es una bendición de Dios, y es algo en lo que me siento muy completo de haber alcanzado. (...) Lo importante es que me fui de allí en paz. No quiero pensar en el pasado, solo en el presente. Y ahora mismo estoy feliz en Málaga, lo que pasó en la NBA ya pasó. Y como digo, muy agradecido por la oportunidad de poder jugar con los mejores, también agradecido con las cosas que no funcionaron porque aprendí. Siento que tuve que pasar por situaciones para madurar", reflexiona Chris Duarte.