Enric Mas confirma las sospechas
Buen inicio del Tour de Francia del líder del Movistar Team, que ha sabido salvar dos días difíciles y es sexto en la general de la ronda francesa
El inicio de Tour de Francia 2025 de Enric Mas está siendo ilusionante. El líder del Movistar Team ha tenido alguna dificultad, pero, a diferencia de otras ocasiones, la ha solventado y eso le ha permitido en los dos primeros días entrar en el grupo de favoritos, algo que pueden decir Remco Evenepoel, Primoz Roglic, Carlos Rodríguez...
El balear marcha sexto en la general, a diez segundos del líder Van der Poel tras acabar duodécimo en la llegada de Boulogne-sur-Mer, lo que le ha servido también para que su equipo sumara 20 puntos UCI. En general se mostraba satisfecho por ese regular arranque, pero sabe que aquí todo puede cambiar en un momento y espera seguir igual de atento en las siguientes etapas.
"He vuelto a tener dos momentos difíciles, pero una vez más, gracias al equipo, he podido entrar en el grupo de favoritos", admitía un Mas que se pudo quedar cortado, pero al que el sacrificio de algunos compañeros le ayudó a posicionarse con los favoritos. "Me encontré bien y, poco a poco, voy estando en buena posición. Es importante no haber perdido tiempo", afirmaba nada más acabar la etapa.
Mas tiene claro que debe seguir la estela de Pogacar y Vingegaard, que han desatado su batalla casi desde el primer día. Lograr eso significa estar arriba en la general. "Pogacar y Vingegaard van a machete, son corredores increíbles, tienen mucho gas... Está claro que nosotros nos tenemos que adaptar a ellos y yo me estoy adaptando. Ha sido un día duro porque no podíamos dejar la fuga con 5 minutos, si no, los hubiéramos visto en meta", reconocía.
Mathieu van der Poel, en homenaje a su abuelo
Si Enric Mas estaba satisfecho, Mathieu van der Poel estaba eufórico. El neerlandés ganaba por segunda vez en el Tour de Francia y eso le ha servido para colocarse líder, al que para un equipo modesto como el Alpecin significa mucho. "Tener el maillot amarillo los dos primeros días del Tour es un sueño para el equipo", aseguró el neerlandés, que sucede a su compañero Philipsen al frente del Tour 225.
"Hace cuatro años que gané la primera etapa en el Tour. Quería ya la segunda", aseguró el corredor. No es la primera vez, pues su anterior triunfo, en 2021, también le dio el maillot amarillo. Algo que su abuelo, el mítico Raymond Poulidor, nunca pudo conseguir pese a haber acabado ocho veces en el podio de París entre 1962 y 1973.
"Los puertos -tres cotas en los 30 últimos kilómetros- eran más duros de lo que me esperaba, ha sido una jornada verdaderamente difícil", reconocía el ciclista del Alpecin, que ya señalaban antes del Tour entre los favoritos a hacerse con victorias parciales en etapas de este tipo. "Todo el mundo decía que yo era el favorito, pero cuando ves la gente a la que tenía que ganar... Creo que he hecho un buen trabajo", asume Van der Poel.