Final inesperado para Nairo Quintana antes del Giro

Movistar Team en general y Nairo Quintana en particular llegan al Giro de Italia 2025, que arranca el próximo viernes, con un perfil bajo. Aseguran que no irán a por la general y su idea es pelear por las etapas, como hicieron el pasado año, cuando Pelayo Sánchez se apuntó una y el propio Quintana estuvo a un paso de dar el zarpazo en la etapa reina, pero el insaciable Tadej Pogacar le quitó el triunfo.

En esta ocasión, el ciclista colombiano llega con más kilómetros en las piernas que el pasado año, pero con las mismas 'malas' sensaciones. Hizo un buen arranque en la Challenge de Mallorca y empezó bien la Vuelta a Andalucía antes de enfermar. Y corrió completas la Tirreno-Adriático y la Volta a Catalunya, las dos que tenía en su calendario para preparar este Giro, en las que no hizo grandes números, pero al menos dio la cara y sumó algunos puntos.

Al Giro llega con pocas expectativas teóricas, como su equipo, aunque también van de tapados. La gran actuación de Einer Rubio en la Milán-Turín demuestra que no están tan mal. Y Nairo Quintana ha podido preparar este año mejor el Giro. No el año anterior, cuando se cayó en la Volta y llegó justo. "Estoy bien, en una buena condición. Llegamos con la intención de batallar y sacar buenos resultados. Nos creemos válidos. (...) Tuve una gripe que me retiró de Andalucía, pero he ido mejorando. Tanto a nivel individual como grupal estamos bien", señala en una entrevista en Marca, en la que al menos admitía haber llevado la preparación correcta. "Hemos ido marcando objetivos para llegar bien a la carrera, pero ahora mismo no sabría decir una en concreto. Iremos día a día", afirma el genio de Cómbita.

El boyacense no quiere oír hablar de grandes objetivos y sí marcarse cosas más concretas. "Existe un gran nivel de corredores, pero pensamos que podemos ofrecer un buen rendimiento. Seguramente iremos a cazar etapas. Vamos con todo...", avisa Quintana, quien, en cambio, no dice que este Giro de Italia parece marcado especialmente para él, ya que su objetivo suele ser jugárselo todo y llegar bien a la tercera semana y ahí se ha concentrado toda la dureza de la prueba.

El ciclista del Movistar Team, que ejercerá de líder junto a su compatriota Rubio, acepta no ser protagonista como otra época, cuando luchaba por el triunfo, pero no descarta nada. "Habrá buenos corredores y será una carrera muy dura. Con esa presencia, seguro que se hace muy complicado", asegura el campeón del Giro 2014, quien sabe lo mucho que se disfruta en esta carrera. "Esta carrera tiene una gran pasión por la gente y el lugar. Es una prueba muy importante dentro del mundo del ciclismo", concluía.