Katy Perry la lía en Formentera

Katy Perry ha elegido la isla de Formentera para grabar su nuevo videoclip, aunque le ha salido caro. La última polémica de la cantante en la que ha acabado sancionada ha dado la vuelta al mundo. Todo comenzó en el verano de 2024 cuando aterrizó en Ibiza y Formentera para rodar Lifetimes, un tema con muchas vibras mediterráneas. Aunque no es oro todo lo que reluce, ya que algunas escenas la han colocado en el punto de mira.

Atardeceres de ensueño, chapuzones y bailes en la arena han sido los protagonistas de el vídeo que la californiana decidió grabar en Formentera. Katy Perry y su equipo se adentraron en un enclave natural protegido, sin esperarse que ese rodaje sin permiso acabaría llamando la atención de las autoridades de la isla. La cantante suma una nueva polémica, poniéndose de nuevo en el eco mediático y enfrentándose a una multa con la que no contaba.

Falta grave inesperada con guiños a España

La productora encargada de la filmación, WeOnTheCity, no solicitó el permiso necesario para grabar en el islote s'Espalmador enclave que se encuentra dentro del Parque Natural de Ses Salines. La Conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Natural ha anunciado las consecuencias de grabar en este entono con un alto valor ecológico: una sanción de 6001 euros por una falta grave, que no llegó a más debido a que no hubo daños ambientales tras el rodaje.

El paraje elegido por Katy Perry y su equipo se encuentra junto a al playa de ses Illetes, formando uno de los sistemas dunares mejor conservados del archipiélago balear con la friolera de 137 hectáreas de arena fina, flora endémica y fauna protegido. A este lugar solo se puede acceder con una autorización especial, lleva protegido desde hace 45 años, exactamente se restringió la entrada en 1980. Además, está correctamente señalizado con señales y cuerdas que delimitan la zona de los turistas.

En Lifetimes la artista aparece bailando sobre la arena blanca, entrando en el sistema de dunas y disfrutando del entorno como si de un decorado de tratase. El vídeo ya ha sido visto por más de dos millones de personas en Youtube. Estas imágenes se mezclan con otras grabadas en el ferry camino a Formentera, baños largos en aguas cristalinas y noches largas en las discotecas de la isla.

Además, Katy Perry no ha querido ignorar el país donde ha grabado, ya que en el videoclip aparece la marca España en detalles como una bandera ondeando, una voz hablando en castellano por megafonía y una paella que lo convierte en una postal de verano.