Tensa y fría, aunque ya no es inexistente. Así se encuentra actualmente la relación entre el FC Barcelona y el Sevilla FC, presididos por Joan Laporta y José María del Nido Carrasco, respectivamente. Así pudo verse en el palco del Ramón Sánchez-Pizjuán el pasado domingo con motivo del encuentro en el que los de Nervión acabaron goleados por el conjunto de Hansi Flick pese a una primera parte bastante igualada.
Tímido, pero en definitiva, un paso hacia el acercamiento entre los clubes, cuyas relaciones están rotas desde febrero de 2023, cuando el Sevilla FC, presidido por aquel entonces por Pepe Castro, lanzó un duro comunicado contra el FC Barcelona a raíz del ‘Caso Negreira’. En la grada noble del Sánchez-Pizjuán se pudo ver, incluso, a ambos presidentes intercambiando impresiones con bastante cordialidad en ciertos momentos, aunque sería también faltar a la verdad si hoy por hoy se afirma que todas las rencillas están resueltas y que pelillos a la mar. Prueba de ello, de hecho, es que no hubo comida de directivas previas al partido, aunque sí una invitación al mismo por parte del Sevilla FC que fue aceptada por Laporta y 19 representantes azulgranas más, entre directivos, ejecutivos y otros trabajadores del club.
Durante la previa del citado encuentro del domingo, en la planta noble del Ramón Sánchez-Pizjuán, y ante las cámaras de Dazn, tampoco se ando con paños calientes Del Nido Carrasco al ser cuestionado por el FC Barcelona, cuando aseguró que “todavía no había visto acercamiento” por parte del conjunto culé y que siguen esperando una explicación por parte del FC Barcelona. “Le hemos invitado al palco, como se merecen, pero no ha habido comida de directivas. No me voy a sentar en su palco hasta que ellos den una explicación, con lo cual, las relaciones que ellos rompieron se encuentran en la misma posición”, apostilló el mandamás sevillista.
Un discurso público ante los medios nacionales que tampoco sorprende en demasía a nadie y que por muchos ha sido entendido como una cortina de humo por parte de Del Nido Carrasco para distraer ligeramente la atención y preocupación del servilismo, centrada en lo que se cuece dentro de la entidad, que no levanta cabeza en lo deportivo ni en lo económico.
Laporta, por ello, sigue con su plan establecido. Una línea de acercamiento que en ciertos círculos bien informados ha sido interpretada como una necesidad para abrir una puerta, la del Sevilla FC, en un problema de cada vez más envergadura como el de Ansu Fati. Al internacional español se le van cerrando los mercados tras haberse resistido a salir en enero y en el FC Barcelona ya dan por hecho que tendrán que ‘comérselo’ hasta final de temporada, cuando en verano se reabra nuevamente su polémica carpeta.
Tanto Deco como Hansi Flick se han llevado semanas haciéndole ver que no tiene sitio en los planes del entrenador alemán para la segunda mitad de curso, por lo que lo ideal era que se buscara una salida en la que pudiera contar con minutos y recuperar el ritmo que requiere para volver a ser el que fue. Ansu Fati, sin embargo, no ha acabado de aceptar ninguna de las propuestas que ha tenido sobre la mesa, ante la imposibilidad de salir en préstamo a otro club de LaLiga por su elevado salario y dudas. Entre ellos, un Sevilla FC que el chico -o más bien su padre- sí ve con buenos ojos, pero al que el Barcelona vetó por la falta de relación entre las instituciones y la obligación de hacerse cargo de un importantísimo porcentaje de su elevada ficha a no poder hacer frente de ella el club de Nervión.
Ansu Fati, o más bien su padre, quien tiene tanto o más que hablar en este asunto que un joven Ansu Fati que no acaba de perder el miedo de volver a lesionarse e ir de verdad en los entrenamientos y partidos, vería con muy buenos ojos volver a sus orígenes. Un Sevilla FC en el que militó en las categorías menores antes de que el Barça le diera caza y con el que en los últimos años ha tenido una conversación muy fluida. Ya lo intentó Bori Fati hace dos veranos, pero no fue factible. También han sido varias sus llamadas a Víctor Orta.
Cierto es también que el Sevilla FC actual no es tan atractivo para cualquier futbolista del caché de Ansu Fati como otros que lo pretenden y que compiten en Europa, sin embargo, la presencia de García Pimienta, quien ya lo tuvo en la cantera azulgrana, es otro aspecto que suma. Es decir, que el Sevilla FC sería un destino que sonaría con más agrado en los oídos de Ansu Fati el próximo verano si se cuadraran el sinfín de circunstancias que rodean a al complicada operación y eso, teniendo en cuenta los casi 14 millones de euros bruto por temporada que percibe el jugador, ha hecho que Laporta comience a ponerse las pilas por lo que pueda pasar, ya que tiene contrato firmado hasta 2027 y ha demostrado que no tiene miedo a quedarse sin jugar.
Hasta la fecha, Ansu Fati tan sólo acumula en 2025 media hora de juego que disputó en Copa del Rey ante el Barbastro, en un partido en el que, además, no fue ni titular. Atrás quedan ofertas de Turquía, Inglaterra, Portugal o Arabia Saudí, donde el último día de mercado ofertaron diez millones de euros más otros cinco en variables por su traspaso. Todas, sin embargo, fueron rechazadas.
Con todos esos mercados cerrados ya, el último el turco este pasado día 11, en ‘Can Barça’ dan por imposible el adiós de Ansu Fati, teniendo en cuenta que lo que se mantiene abierto es el fútbol de Suiza (17 de febrero) y la Superliga de Rusia (20 de febrero), destinos que bajo ningún concepto entrarían en los planes del futbolista y su familia. ¿El Sevilla FC? Una opción que vuelve a comenzar a cocinarse a fuego lento, muy lento.