Sorprendente movimiento del Betis: Junior no viene solo
La dirección deportiva verdiblanca ha decidido dar un paso más en el carril zurdo que supondrá 'poner en apuros' al hispano-dominicano y otra renovación íntegra de la posición


El acuerdo con Junior Firpo para las tres próximas temporadas tan solo se trata de la primera parte del plan de la dirección deportiva verdiblanca en el carril zurdo, que experimentará este verano la segunda revolución consecutiva un año después del cambio radical en el pasado mercado estival.
De esta forma, el hispano-dominicano no regresará solo y no tendrá asegurada la titularidad como parecía apuntar si luchara por el puesto con uno de los actuales inquilinos del carril zurdo, pues ni Romain Perraud ni Ricardo Rodríguez han convencido este curso más allá de la decente aportación del helvético en la segunda parte del curso. Y es el que plan heliopolitano como apunta el periodista Mateo González pasa por aumentar la competencia en la izquierda con otro fichaje que impida acomodarse a Junior Firpo en su regreso al Benito Villamarín.
En este sentido, el Betis no ha cerrado su actividad en la banda izquierda tras cerrar a Junior y trabaja en la llegada de otro futbolista de banda con un perfil diferente al exbético para aumentar el manual de recursos de Manuel Pellegrini, que suele utilizar habitualmente los carriles como vía de peligro.
Así, la dirección deportiva está centrada ahora en la búsqueda de un lateral con mayor proyección ofensiva, que se incorpore constantemente al ataque y ofrezca salidas por fuera además de permitir la recuperación de balón. En definitiva, un lateral firme atrás, pero con mucho recorrido para que proyecte la siniestra y desdoble al extremo.
Más allá de estas características, no se ha limitado el rastreo a futbolistas jóvenes con proyección y posibilidad de futura plusvalía, sino que también se atienden opciones más contrastadas con menos margen en el mercado, por lo que ahora mismo el foco es amplio.
No obstante, cabe apuntar que no hay prisas en lo que a este movimiento llamativo se refiere, tanto en cuanto antes habrá que abrir hueco para este nuevo refuerzo, para lo que se precisa ya las salidas de los dos laterales. Junior requería el adiós de Perraud o Ricardo Rodrígurz, pero el plan de la renovación integral exige que se marchen ambos. En el caso del helvético no se antoja complicado, pues existe una cláusula en su contrato mediante el cual podría rescindirlo de forma unilateral en su último año, una posibilidad de la que el Betis se encuentra muy pendiente. Perraud le queda hasta 2029, pero mantiene cartel en su país de origen.