Vergüenza: el Espanyol, abochornado
El choque que ha disputado el Espanyol en casa ante el Athletic ha vuelto a poner de manifiesto que algunos no van al fútbol a divertirse, precisamente

El encuentro entre el Espanyol y el Athletic ha quedado marcado, sin dudas, más allá del resultado, por lo sucedido con su afición. La entidad barcelonesa ha tenido que vivir cómo unos cuantos, que no se representan ni a sí mismos, se han puesto directamente en el foco por un acto deleznable y despreciable como es la emisión de gritos racistas. El objetivo, en esta ocasión, ha sido Maroan, quien se ha incorporado hace pocas fechas a la dinámica del primer equipo vizcaíno.
Como ya sucediera hace unos años con Iñaki Williams, quien, por cierto, denunció al colegiado del encuentro, Cuadra Fernández, esta situación, algunos seguidores del Espanyol han vuelto a quedar ‘retratados’ por su incívico comportamiento en la grada. Como no podía ser de otra manera, tras el encuentro, su técnico, Manolo González, no lo ha dudado a la hora de condenar este tipo de incidentes, que no hacen sino manchar la imagen de la entidad.
El vergonzoso acto por el que el Espanyol se pone de nuevo en el foco
Transcurría la primera parte con total normalidad, hasta que, de repente, el árbitro decidió parar el juego durante unos instantes. Tras hablar con miembros del Espanyol, se trasladó a megafonía que se debía informar a los aficionados, tanto en las pantallas como en forma de mensaje oral, que estaban prohibidos los gritos y símbolos de carácter racista, homófobo o xenófobo. Aunque, en un principio, parecía que era por Iñaki Williams, finalmente se descubrió que la víctima de los insultos era Maroan.
La afición del Espanyol la toma con Iñaki Williams
Si no fueron suficientes los lamentables cánticos que se dedicaron al rival, la afición del Espanyol no tuvo una mejor idea que tomarla con el denunciante de estos hechos. Cada vez que Williams tocaba el balón, era víctima de una sonora pitada. Una vez más, el comportamiento de unos pocos volvió a poner el foco en un club que ya tuvo muchos problemas en el pasado por episodios racistas, siendo, precisamente, el delantero del Athletic la víctima de los mismos.
Iñaki Williams, contundente sobre el racismo en Cornellá
Tras el enfrentamiento, el jugador no pudo ser más contundente al respecto. "Al fútbol hay que venir a disfrutar. No pueden ocurrir este tipo de cosas. Maroan ha hecho una jugada individual, el balón ha salido fuera y le han gritado "puto moro". No es la primera vez que pasa aquí. El árbitro ha actuado muy bien. Hay que darle visibilidad y que castiguen a los culpables. Eso no debe empañar a la afición del Espanyol. Tienen leyendas de color como N'Kono y al fútbol se tiene que venir a apoyar. Los jugadores del Espanyol necesitan a su afición y no que cuatro empañen el fútbol".
¿Qué dice el acta?
"En el minuto 17 del partido el jugador con dorsal Nº9 del Athletic Club, D. Iñaki Williams, me comunicó un incidente racista desde uno de los fondos del estadio donde se encontraban los aficionados del RCD Espanyol (identificados como tal por indumentaria) que se habían dirigido al jugador con dorsal Nº21 de su equipo, D. Maroan Sannadi, en los siguientes términos: "¡Puto moro!", por lo que en ese momento activé el protocolo contra el racismo establecido para estos casos. El partido se reanudó tras comunicarle los hechos al Delegado de Campo y dar traslado de los mismos a la Unidad de Control Operativo de la Policía encargada de la seguridad en el estadio, después de hacerse público por la megafonía del estadio el comunicado pertinente para estas situaciones".
El Espanyol, claro sobre el asunto
En cuanto a la postura del Espanyol como entidad, la escuadra ‘perica’ no lo dudó. A través de un comunicado en redes sociales, el cuadro de Manolo González quiso condenar de forma “rotunda” lo ocurrido y cualquier acto de racismo en cualquier estadio, demostrando que no va a permitir que este tipo de actos vayan a quedar impunes.