Una alternativa económica al fichaje de Bryan Gil
El Girona desea seguir contando con el barbateño, pero no es fácil convencer al Tottenham. Se miran otros extremos zurdos, intensificando el seguimiento sobre una de las revelaciones en Países Bajos

El Girona se mueve con cautela en estos primeros compases del mercado de fichajes. De momento, Quique Cárcel no ha cerrado ninguna incorporación, lo que no quiere decir que el director deportivo no trabaje en varios frentes para reforzar una plantilla que no respondió a las expectativas en esta última temporada. Así, uno de los puestos en los que se centra la atención es la banda izquierda del ataque, donde el gran deseado sigue siendo Bryan Gil. El barbateño finalizó su cesión y busca una salida definitiva del Tottenham, valorando la posibilidad de seguir a las órdenes de Míchel, con el que se ha sentido importante. Pero no será fácil convencer al club inglés. En Montilivi, desde luego, no están dispuestos a llegar a los 15 millones de euros de la opción de compra pactada el pasado verano, la cual no se ha hecho efectiva.
Esta incertidumbre con el ex sevillista, que también es pretendido por Mendilibar para su Olympiacos, provoca que se miren otras alternativas más económicas. Para ello ha sido ofrecido el mexicano César Huerta, al que se tanteó el pasado verano y acabó arribando en enero al Anderlecht por solo dos millones. Pero en el seno del conjunto catalán tampoco se olvidan de Filip Krastev, cuyo nombre ya salió a la palestra el pasado mes de marzo.
Desde entonces, el seguimiento sobre el extremo zurdo búlgaro, de 23 años, se ha intensificado, apuntando el diario As que es uno de las opciones que se están monitorizando de cara a este mercado. Su valor de mercado es de 4 millones de euros según la web especializada Transfermarkt y la ventaja es que pertenece al Lommel, que al igual que el Girona es uno de los clubes que se encuentra bajo el paraguas del City Football Group.
Más clubes interesados
En el conjunto belga tiene contrato hasta 2027, pero el ex del Slavia de Sofía, que lo traspasó en 2020 por 2,3 millones, ha militado esta última campaña como cedido en el PEC Zwolle de Países Bajos, donde ha firmado seis goles y seis asistencias en 32 partidos. Unos números que le han colocado en el escaparate y que hacen que haya más clubes europeos pendientes, entre ellos el Twente de ese mismo país y otros en Alemania, donde ya sonó para el Wolfsburgo.
Internacional por Bulgaria en 24 ocasiones, Krastev podría dar de ese modo un salto en su carrera tras varias temporadas acumulando préstamos, pues en realidad no ha llegado a debutar con el Lommel. En su lugar, ha pasado por el Troyes, el Cambuur, el Levski de Sofía y Los Ángeles FC antes de romper definitivamente en la Eredivisie, lo que puede abrirle las puertas de LaLiga.