El Real Madrid, con más apuros de lo esperado, ya se encuentra en la gran final de la Copa del Rey. El conjunto dirigido por Carlo Ancelotti, que tuvo que recurrir a la prórroga, pudo doblegar, con mucho sufrimiento, a una Real Sociedad que se quedó muy cerca de dar la sorpresa en el Santiago Bernabéu, que se temió lo peor en algunos momentos. A pesar de que lo han pasado mal, lograron sacar hacia delante un encuentro que se les complicó sobremanera. Uno de los protagonistas de este enfrentamiento fue, sin duda, Vinicius, quien ha vuelto a dar un notable paso hacia delante.
Eso sí, durante todo el tiempo que permaneció sobre el terreno de juego, el brasileño no fue uno de los jugadores más brillantes del Real Madrid. Hasta que llegó las 23.07. Tal y como apunta Marca, tanto Carlo Ancelotti como su segundo, Davide, le dieron un notable toque de atención al delantero, quien no estaba siendo demasiado solidario en la presión cuando la Real vencía por 1-2 sobre el césped del Bernabéu.
Tras una acción en la que los de Imanol pudieron salir de forma sencilla con el balón, Vinicius se tuvo que dirigir a la banda, donde le esperaba un Ancelotti que estaba más enfadado que nunca con él. Debido a esto, el Santiago Bernabéu, incrédulo ante lo que estaba viendo, empezó a pensar que el italiano le iba a sustituir, algo que podría haber sido clave. Después de que Davide Ancelotti llamara a Brahim, el internacional con Brasil se temió lo peor, aunque no fue así, ya que el sacrificado fue Lucas, quien fue sustituido por Modric.
Con Brahim en la nuca, Vinicius, con el paso de los minutos, entendió el mensaje que le lanzó su entrenador, aunque se tuvo que esperar hasta un nuevo gol de los visitantes para que reaccionara. A partir de ese momento, se convirtió en el jugador al que tiene acostumbrados a los merengues. En el 82, fue fundamental para el segundo tanto local, obra de Bellingham, y que se produjo tras varios regates a todos sus rivales. Pocos minutos después, pudo forzar el saque de esquina que dio origen al empate a tres, un momento vital para los de Ancelotti.
Gracias a esta reacción, el Real Madrid pudo levantar una eliminatoria que se le había complicado sobremanera. Con el objetivo de que su estrella reaccionara, Ancelotti tuvo que ponerse más serio que nunca, ya que debe evitar que Vinicius caiga en la apatía y ‘desaparezca’ durante mucho tiempo sobre el terreno de juego. El italiano es cada vez más exigente con el brasileño, por lo que espera que el delantero, que se quedó sin el Balón de Oro hace unos meses, pueda mantenerse a un alto nivel de forma regular.
Tras el partido, Ancelotti fue claro sobre un jugador que no puede ‘desconectarse’ en ningún momento, ya que el Real Madrid le necesita para ganarlo todo. “Sí, esa conversación, ese toque ha sacado al mejor Vinicius. A partir de ahí ha subido el ritmo y la calidad. Ha sido determinante. Con una jugada suya hemos marcado el 2-3 y ha jugado un partido espectacular”, apuntaba un entrenador que respira más tranquilo, pero que quiere más de los suyos para poder volver a dominar con puño de hierro tanto en España como en Europa.