Almeyda toca diana en el Sevilla: "Los débiles quedan afuera, acá sólo seguirán los luchadores"

El míster blanquirrojo realiza una vehemente defensa del estilo de juego que está imponiendo y vuelve a meterse en la cabeza de futbolista o aficionados para tratar de anteponer las prioridades que a su juicio son necesarias para dejar de luchar por no descender

El técnico del Sevilla FC, Matías Almeyda, ha comparecido este viernes en la quinta de las seis ruedas de prensa que ofrecerá en sólo nueve días, debido a la acumulación de encuentros por la sesión intersemanal que metió la derrota en casa del martes ante el Villarreal CF (1-2) en medio de la victoria del pasado sábado en Mendizorroza contra el Deportivo Alavés (1-2) y la visita de este próximo domingo al Rayo Vallecano, en la jornada 7 de LaLiga EA Sports. El argentino acepta, comprende y asume las críticas, pero pone en valor su trabajo y su estilo. Y avisa de que es importante ser fuerte ante la adversidad porque los débiles no tienen cabida en este deporte tan exigente y carente de meritocracia. Desde la humildad, agradeciendo el apoyo y la comprensión que siente por parte de la afición, el 'Pelado' ha sacado toda su verborrea y su carácter.

La derrota ante el Villarreal y la visita al Rayo Vallecano

"El otro día cometimos errores que no podemos cometer. Más allá de que jugamos 15 minutos con uno menos", señaló Almeyda, que sabe lo que se encontrará en Vallecas: "Como siempre, estamos haciendo análisis de lo bueno y de lo malo, tratando de reflexionar y mirando bastante lo que hicimos, cómo fue el partido, en qué estuvimos acertados y en qué no para preparar lo que viene ahora: un rival difícil, un terreno de juego diferente a los demás, con menos espacios, en el que ellos se hacen muy fuertes... Bueno, lo que se sabe hace 30 años. El Rayo es un rival difícil, con buenos jugadores, bien entrenado y que siempre da batalla con buen juego, con agresividad y con intensidad".

"En estos seis partidos hemos tenido momentos regulares, momentos malos y momentos buenos, como todos los equipos. Ahora, no vi que en ninguno de los seis partidos hayamos sido superados ampliamente por un rival. Cuando uno empieza a salir desde abajo, el análisis es ése: ¿Estoy para luchar o no? ¿Los jugadores van a luchar o no? ¿Están luchando? ¿Estamos sacando? ¿Queremos estar mejor? Claro que sí, nadie quiere perder puntos. Estamos deseando ganar de local, pero creo que ahora es donde más fuerte hay que ser, ante la adversidad. Si la adversidad te gana, es porque sos muy débil. Los débiles en esto quedan afuera. Y acá siguen los luchadores. Creo que hemos encontrado un grupo de luchadores y que les vamos a seguir inyectando esa adrenalina para que sigan luchando".

Almeyda prefiere morir yendo arriba: "Metiditos atrás casi descienden"

"Creo que hay algo bueno en eso de insistir para ir a por más y no quedarte metidito ahí atrás, a ver qué pasa. Metiditos ahí casi se van a la segunda división. No los quiero metiditos atrás. Quiero que salgan para el frente, no para atrás. Por eso me contrataron a mí, si no, tienen que contratar a otras personas que jueguen con otro estilo. Hay que ir para adelante. (...) Estamos en la búsqueda de querer ganar el partido y vamos a tener que aceptar que hay partidos que no ganemos. Son realidades que a veces te hacen más fuerte. La irrealidad, mentir a la gente y mentirnos entre nosotros no nos sirve. Hay muchas cosas buenas para seguir y para insistir. Si aflojamos va a pasar lo de antes. Vieron cómo terminaron nuestros jugadores, lo entregaron todo. Y si siguen entregándolo todo van a obtener más puntos que los que obtuvieron antes. Vamos a salir".

"Lo mental es lo más difícil. Lo viví como jugador, cuando descendí con River Plate. Es difícil salir de estos momentos, porque cada derrota es un golpazo; pero en realidad lo tenemos que aceptar y seguir insistiendo por este camino. El fútbol no es de merecimiento, eso creo que ya lo lo entendimos todos. Es el camino el que te va a llevar a merecer más. No nos podemos desviar, aceptamos los errores, incluyéndome, y metemos el sello a lo bueno que se viene haciendo. El tiempo nos va a pagar para bien. El otro día nos quedamos con 10 y, si el partido se empata, la sensación sería espectacular. Con uno menos, el equipo provocó acciones para poder empatar. Insistir, trabajar, corregir, mirarse para adentro, buscarle la vuelta y lograr esa estabilidad. Eso estamos buscando".

Resta importancia al asado entre técnicos y plantilla

Lo del asado salió en todo el mundo y yo hago asado todas las semanas. Son actos de amor. No por eso el equipo va a jugar mejor o peor. Se le dio demasiada importancia cuando debería ser normal que alguien quiera juntar a un grupo y que ese grupo viva hablando de fútbol. Es lo que me interesa a mí y es lo que veo que se va perdiendo en este fútbol. Yo soy un apasionado del fútbol. Hay que hablar de fútbol. Hay que consultar al otro. Uno trata de tener ese espíritu de convivencia, pero lo hice siempre.

Defiende su rotación masiva ante el Villarreal

"Si se interpreta que yo los cambios lo hice para quedar bien (con algunos jugadores), entonces me están minimizando por ahí. Porque no es un club de amigos esto. Yo no puedo priorizar grupos. Ahora lo que estoy priorizando es la parte física. No me puedo poner a explicar 'Este puede correr 20 minutos, este 28, este hizo 11 km, este puede correr a tal intensidad, este me pidió jugar 15, el otro no puede...'. Yo preparo un equipo para que estén en toda disposición. No es un capricho mío hacer ocho cambios. A veces, no se recuperan. A veces hay molestias. Por ejemplo, yo a Tanguy le iba a poner al inicio, como a otros chicos, pero no pude".