Luiz Felipe encuentra la solución perfecta
El central brasileño, tentado por Cordón para cambiar de orilla del Guadalquivir como él, ha declinado la propuesta y ha dado su visto bueno para jugar cedido en el Rayo... y volver al Betis en 2026

No se lo perdonaría... no se lo perdonarían. No habría sido ni el primero ni el último que cambia de bando en esta ciudad dual como Sevilla, mucho más para el fútbol. El ejemplo más reciente, el de Antonio Cordón, director deportivo del Real Betis entre 2020 y 2023, que acaba de firmar por el eterno rival también por tres temporadas como director de fútbol profesional. Y una de sus primeras decisiones, una vez atado Matías Almeyda para el banquillo, ha sido la de llamar a Luiz Felipe, la mayor plusvalía que ha regaló a los verdiblancos, tras querer firmarlo por cuatro millones de euros en su último año con la Lazio, reclutarlo a coste cero en 2022 y venderlo en 2023, ya con Ramón Planes en su cargo, por 22 millones al Al-Ittihad, curiosamente el destino del propio ejecutivo ilerdense unos meses más tarde, lo que motivó la cláusula incluida en su rescisión para que el central italo-brasileño no pudiese volver gratis a Heliópolis hasta 2026.

El de Colina encontró acomodo la pasada ventana de transferencias en el Marsella, justo durante el año y medio que le quedaba en el purgatorio antes de volver al cielo de La Palmera, aunque Roberto de Zerbi lo descartó pronto y, para no pasarse un año entero en la grada o jugando muy poco, está escuchando propuestas, preferentemente de LaLiga para amortiguar su retorno. El Sevilla FC se presentaba como una opción, aunque el zaguero de 28 años ha declinado la proposición por considerarla en su fuero interno una traición a la afición que llegó a idolatrarle en apenas un año por su contundencia y carácter. Con Rayo Vallecano y RCD Mallorca igualmente interesados en una cesión pura, la mejor solución para los intereses del canterano de Ituano, se habría decantado Luiz Felipe por los franjirrojos, que avanzan en el trato con sus homólogos de la Costa Azul.
Realmente, el central no tiene nada firmado ni de palabra con el Real Betis, aunque, durante las gestiones con los saudíes para que volviera a préstamo las Navidades pasadas, quedó claro a ambas partes el deseo mutuo de reencontrarse más pronto que tarde. Como ocurriera en su día con Héctor Bellerín y más recientemente con Junior Firpo, este último con la condición añadida de canterano que cierra el círculo, el internacional 'azzurro', en cuanto ha sido factible, se han tendido puentes y recorrido el camino inverso para que el verdiblanco volviera a ser su color.