El 2025 de Carlos Sainz y Fernando Alonso: del sufrimiento a los destellos de gloria
Los pilotos españoles vivieron un año de contrastes: mientras que el asturiano sufría con un AMR25 problemático, el madrileño consiguió adaptarse poco a poco a su nuevo monoplaza en Williams, recuperando rendimiento y terminando la temporada en el Top 10 de la clasificación de pilotos

Los monoplazas han sido este año un dolor de cabeza constante para Fernando Alonso y Carlos Sainz. El primero no pudo hacer mucho más con el AMR-25, del que en más de una ocasión ha hablado haciendo referencia a fallos en la dirección en Bharéin, problemas de freno que le hizo abandonar China y México y daños en la suspensión por grava en Monza. Por otro lado, el madrileño logró mejorar en la segunda parte de la temporada, no sin antes sufrir, y mucho, por la adaptación a un coche rebelde que le ha costado domar.
Un AMR25 que no terminaba de cuajar para Fernando Alonso
Alonso tiene la vista puesta en 2026 y en el cambio de normativa de la FIA desde hace unos meses, tras un año que ha sido complicado de remontar. Su monoplaza le ha traído por el camino de la amargura, tras darle bastantes problemas a lo largo de la temporada.

Quizá uno de los fallos más recordados de la temporada fue el que sufrió durante los entrenamientos libres del GP de Bahrein 2025, que tras dos vueltas del inicio de la FP2 se llevó un buen susto cuando el volante del AMR25 se soltó sin explicación aparente y se quedó con él en las manos mientras rodaba en pista. Tras la sesión, el asturiano comentó: ''Sí, el coche no funcionaba y no podía cambiar de marcha en un momento dado, así que sí, tuve un apagón''. Fernando Alonso, a pesar de todos los problemas, ha logrado queda en el décimo puesto con 56 puntos. En cuanto a su compañero, acabó en el puesto número 16 mientras que en el duelo interno de clasificación de Aston Martin perdió contra el asturiano con un apabullante 0-24.
Sainz se hace en la segunda mitad de 2025
Carlos Sainz está viviendo una temporada de cambios, tras su salida precipitada de Ferrari, que se arriesgo con la incorporación de Lewis Hamilton, llegó a Williams con ganas de volver a empezar. Pero no todas las historias tienen un prólogo fácil, y su monoplaza le dio problemas. En el GP de Austria no pudo participar debido a un problema de frenos en el FW47, que provoco un incendio en su coche justo antes de la salida.
Aunque parece que todo comenzó a cambiar con el tiempo, tras una adaptación que se le hizo algo larga pero que le ha merecido la pena, ya que acabó en el noveno puesto de la clasificación general y consiguiendo dos podios. Álex Albon consiguió adelantarlo y quedar en el octavo lugar con 9 puntos más, pero no consiguió ningún podio. Eso sí, Carlos Sainz tiene la vista puesta en el mismo lugar que Alonso, en 2026, tal y como dejaba caer durante la temporada: ''Nosotros seguimos teniendo mala suerte, seguimos sin mejorar el coche, entonces hay que mejorar el coche en algún momento y tener buena suerte''.