Lando Norris pone picante al Mundial y Fernando Alonso logra la hazaña en Hungría

El mundial de Fórmula 1 se va a de vacaciones, pero antes ha tenido un último de clase de lo más movido. El más listo ha sido Lando Norris, que en una carrera de perfecta gestión ha superado a su compañero Oscar Piastri, aunque en las últimas vueltas ha estado muy cerca de superarle, pero no ha podido y se van al parón con nueve puntos de diferencia. Por detrás de ellos George Russell ha cerrado el podio y la gran noticia ha sido Fernando Alonso, manteniendo la 5ª plaza en que salía, y certificando el gran nivel de Aston Martin en Hungaroring.

Fue Charles Leclerc quien tomó el liderato con solvencia desde la salida, mientras que Russell y Alonso sorprendían a un espeso Norris en las primeras curvas, colocándose el piloto de Mercedes en puestos de podio y el español cuarto. En paralelo, Gabriel Bortoleto superaba a Max Verstappen y posteriormente a Lance Stroll tras el semáforo, mientras que Carlos Sainz hacía lo propio con Hamilton, ubicándose en la duodécima plaza. Con ello se producían las primeras sorpresas en un trazado más que complicado para vislumbrar adelantamientos en pista. No obstante, y tras ese efervescente punto de partida, Norris consiguió superar a Alonso, intentando recuperar el terreno perdido ante Russell y, especialmente, a costa de un Oscar Piastri que intentaba aumentar su renta en la clasificación del Mundial.

Juego de estrategias

De hecho, Alonso no dejaba de gestionar los neumáticos, generando un importante ‘tapón’ desde la quinta plaza para optar a la estrategia de un solo cambio de gomas, mientras que la mayoría de la parrilla empezó a desfilar desde la 15ª vuelta por la zona de boxes. Con dicha ecuación, Alonso llegó a alcanzar la segunda plaza en esos compases aún iniciales, liderando la carrera a partir de la vuelta 22 Lando Norris, que optaba por la misma estrategia de un solo cambio de ruedas. Sin embargo, tanto Leclerc como Piastri y Russell recuperaron la posición sobre el español en el momento que empezaron a calentar neumáticos y la guerra se clarificaba en la zona alta entre los dos McLaren y los líderes en la tabla de Ferrari y Mercedes.

Ya en la vuelta 32, Norris era el último de los favoritos en pasar por el garaje, lo que llevó a Leclerc a retomar la primera plaza mientras Piastri iba poco a poco limando la distancia sobre el Ferrari del piloto monegasco. Superado el ecuador de la prueba, Leclerc sorprendió con su segunda parada a boxes en la vuelta 41, lo que trastocó en la pizarra Piastri, que tomaba el liderato, y Norris, que se colocaba segundo,. Fue Piastri el primero en mover ficha, en esta particular pelea de estrategias, volviendo al box de McLaren en la 46ª vuelta, dejando a Norris de líder y a Leclerc segundo. Sin embargo, lo que parecía un órdago arriesgado del oceánico terminó siendo una buena opción ya que, cinco giros después, Piastri adelantaba al piloto de Ferrari, que comenzaba a sufrir en pista, mientras que Norris, con un solo ‘stop’, esperaba instrucciones del equipo.

Final agónico

A falta de diez vueltas, la pelea se centraba entre la persecución por la cabeza de carrera de Piastri sobre Norris y la batalla por el podio de Russell y Leclerc, que se anotó el piloto de Mercedes tras asomarle el morro sobre las costuras del Cavallino Rampante en este circuito. Al final, Piastri intentó en los últimos giros adelantar a Norris en una cardíaca lucha que acabó anotándose el inglés y que ajusta la clasificación a solo nueve puntos, 284 para el australiano por 275 del británico, a tres semanas para afrontar la próxima cita que será en Países Bajos del 29 al 31 de agosto.