Las cuentas de Sinner para quitarle el número uno a Carlos Alcaraz
El tenista español se estrenó en tierras parisinas ante Cameron Norrie con el firme propósito de salir de este certamen con su plaza número uno del mundo ya asegurada. Ahora, Sinner lo puede alcanzar

El español Carlos Alcaraz, exento de la primera ronda por su condición de cabeza de serie en el Masters 1000 de París, el último del año, se ha estrenado este martes ante el británico Cameron Norrie, que llegaba de haber derrotado al argentino Sebastián Báez por 6-3 y 6-4 en la primera ronda. Y se ha despedido.
Le ha tocado hacerlo en el turno nocturno. Y en el octavo duelo entre el tenista español y el actual número 31 del mundo, el resultado ha sido: 6-4, 3-6 y 4-6. Batacazo inesperado para el murciano.
Era el segundo enfrentamiento de ambos de esta temporada, tras el que protagonizaron en los cuartos de final de Wimbledon, en el que Alcaraz consiguió la quinta victoria contra el británico. Hasta entonces, Norrie había derrotado en dos ocasiones a Alcaraz, en la final de Río de Janeiro de 2023 y en los cuartos de Cincinatti del año anterior. Ahora, el cara a cara ya es de 5-3 para el de El Palmar.
Y entre los retos que tenía Alcaraz en mente en este partido estaban los siguientes: su triunfo 67 del año; conseguir la decimoctava victoria consecutiva en un Masters 1000; el seguir optando al que sería su cuarto título de esta categoría esta temporada (algo que nadie ha conseguido desde 2016); y no hacer peligrar su plaza número uno del mundo. Pues todos se han ido al traste.
Cabe recordar que el español, ganador de los torneos de Montecarlo, Roma y Cincinatti, no perdía en un Masters 1000 desde el pasado mes de marzo, cuando cayó de salida contra el belga David Goffin, poco después de haber perdido la final de Indian Wells frente al británico Jack Draper.
Y antes del duelo ante Norrie, Alcaraz se mostraba desconfiado consigo mismo: "Esta parte de la temporada no la suelo hacer muy bien y me motiva el reto de mejorar lo que he hecho los años anteriores y ganar lo máximo que pueda". Pues dicho y hecho.

Alcaraz pagó sus errores, 54, en el partido en el que no se sintió cómodo ni cuando iba ganando y sufrió su primera derrota desde la final de Wimbledon contra el italiano Jannik Sinner. Ahora la puerta de arrebatarle la cima del tenis aparece abierta para el transalpino, pese a que él mismo se encargó de asegurar que era un imposible. La debacle de Alcaraz lo deja más sencillo. Sólo tiene que ganar la corona parisina para volver a sentarse en el trono de la ATP.
Las cuentas de Sinner para acabar el año como número uno del mundo
Carlos Alcaraz le ha servido a Sinner la corona de la ATP en bandeja prácticamente. Cuando el italiano ya se había despedido de este objetivo antes de que ambos se estrenaran en París, el murciano ha sucumbido a las primeras de cambio y ahora está en las manos del italiano el poder volver a colocarse en la cima del ránking.
El español ha perdido 90 puntos por haber caído en esta ronda, por lo que si Sinner se hace con el título se volverá a sentar en el trono y llegará a las ATP Finals 2025 de Turín en lo más alto de la clasificación mundial.
Por otro lado, la pugna en la Race ATP puede estrecharse mucho también si el italiano gana el título, porque se quedaría a sólo 1.050 puntos del murciano, con los 1.500 del torneo de maestros aún por jugar. Para que dicho título no se lo quitara, Alcaraz estaría obligado a sumar 500 puntos en Turín si no quiere estar pendiente de lo que haga Sinner.