Carlos Alcaraz evita el desastre en Montecarlo
Carlos Alcaraz ha mostrado dos caras en su estreno en el Masters 1000 de Montecarlo, perdiendo con un juego paupérrimo el primer set ante Fran Cerúndolo, pero arrasando en los dos siguientes para colarse en tercera ronda sin sufrir en exceso

Las dos caras de Carlos Alcaraz se han presentado este miércoles en Montecarlo. Su debut en el Principado ante Fran Cerúndolo ha tenido de todo, primero un set inicial paupérrimo en el que ha dado una imagen malísima, que hacía pensar en que los demonios que le han acompañado todo el año también se apuntaban a la gira terrícola. Pero en los dos siguientes sets ha sacado un arsenal gracias al que ha podido ganar sin problemas. Un rival del nivel del argentino le ha permitido probarse, y sobre todo, quitarse de encima las grandes dudas con las llegaba a la arcilla. Ahora en tercera ronda le espera un rival más cómodo sobre el papel, Daniel Altmaier.
Como acostumbra y sobre todo, prefiere hacer en tierra, Carlitos empezó restando, y en el primer servicio de Cerúndolo no pudo casi plantar cara. Aunque entró de lleno al partido ganando los dos siguientes parciales para conseguir una rotura que le puso en una gran situación. Pero nada más lejos de la realidad, pues al verse por delante el murciano se reencontró con los mismos demonios que le han acompaño en demasiados tramos de este año. Errores no forzados, malas elecciones, precipitación, y en si mismo un juego que no se parece nada al que puede llegar a mostrar en una pista de tenis.
Tal fue su caída que muy pronto se dejó el primer parcial, donde solo pudo ganar un juego más, para el 6-3 con el que Cerúndolo se ponía en posición de lograr el sorpresón de una edición que ya ha visto como en esta segunda ronda se iba para casa antes de tiempo el cabeza de serie número 1, Alexander Zverev. Pero el alemán llegaba en muy baja forma, al igual que Carlos, pero el murciano, actual campeón de Roland Garros, tiene ese puntito más que en tierra hace que siempre se le considere el gran candidato contra cualquiera.

El resurgir de Carlitos
En el segundo set todo estuvo a punto de irse al traste en el primer juego, pues de nuevo con su saque el de El Palmar se atrancó, concediendo dos bolas de rotura, sin embargo, las salvó. Y ese fue el espoleo que necesitaba para resurgir, lo que logró a las primeras de cambio, rompiendo el saque de Cerúndolo primero, y confirmándolo después, aunque con sufrimiento salvando dos bolas más de rotura, con algunos golpes antológicos. A partir de ahí el argentino entró en barrena, lastrado por las oportunidades desaprovechadas, y regalo en blanco otro 'break' que de nuevo confirmó el español, para más tarde cerrar el set al resto, con un 'rosco'.
El momento decisivo
En el tercer set llegó el verdadero Carlos Alcaraz. La central del Montecarlo Country Club fue testigo del resurgir del campeón de Roland Garros, que sacó todo su arsenal. Solo perdió el primer juego al resto, pero después torturó hasta la extenuación a su rival. Dejadas -especialmente certero con ellas-, derechazos, restos ganadores, voleas y un sinfín de golpes que le sirvieron para quitarse las muchísimas dudas que había mostrado en el primer parcial. Las bolas que se le iban por metros comenzaron a tocar la línea y sobre todo, dejó de lado los fallos de concentración. Así cerró el partido con un 6-1 que sobre todo, le permite respirar tranquilo y viendo el final, incluso ser optimista de cara al resto de la semana.