La retirada de Dimitrov salva a un Sinner hundido en Wimbledon
Jannik Sinner estaba siendo superado con contundencia por Grigor Dimitrov que había ganado los dos primeros sets, hasta que en el tercero el búlgaro ha tenido que retirarse por una lesión en el pectoral que no le ha permitido ni intentar seguir
Los grandes jugadores a veces tienen suerte en sus peores días. Eso es lo que ha experimentado en los octavos de final de Wimbledon Jannik Sinner cuando estaba totalmente desahuciado ante Grigor Dimitrov. El búlgaro ganó los dos primeros sets con una contundencia totalmente inesperada, pasando por encima del número 1 del mundo como muy pocas veces habíamos visto. Una caída en el primer set le ha lastrado, pero aún así el búlgaro estaba siendo muy superior y estaba a un paso de la victoria. Hasta que ha ocurrido lo que nunca queremos ver en la pista, cuando se disputaba el cuarto juego de la tercera manga, Dimitrov ha sentido algo en el pectoral y rápidamente se ha tenido que tirar al suelo y decir adiós al partido.
El final tan dramático hace muy complicado hablar de lo sucedido, pero la única realidad es que Dimitrov estaba siendo muy superior, haciendo uno de los mejores partidos de su vida, o al menos de esta parte de su carrera. Sacando a la perfección, con un revés cortado que no era capaz de responder Sinner y con una derecha invertida que le daba un punto tras otro. Era su día y lo sabía.
Un huracán búlgaro
Ya en el primer set salió como un tiro, lo que se sumó a que el de San Cándido comenzó más timorato, además de que se resbaló y se hizo algo de daño en el codo. Con ese quiebre inicial Grigor pudo aguantar hasta el final y con un 6-3 dar un primer golpe al partido. Era el primer set que el italiano perdía en todo el torneo, por lo que se podía considerar un accidente, pero nada más lejos de la realidad. Porque el segundo fue muy parecido. Comenzó muy bien y pronto se puso de nuevo por delante con una rotura. Sinner se estaba viendo superado y pidió un tiempo médico para tratarse los dolores en el codo, que le seguían lastrando.
Tras la pausa las cosas han comenzado a ir mejor y con 5-4, cuando el búlgaro sacaba para cerrar el set, ha logrado romper y empatar. Sin embargo, en un gesto muy raro para él, no ha sido capaz de confirmar la rotura y en el siguiente juego ha perdido el set definitivamente. Ha terminado de nuevo quejándose del codo tras un golpe en el que de nuevo ha terminado en el suelo, pero no parecía nada grave. En ese momento se ha parado el partido para que se cerrara el techo por la falta de luz, hasta que ha comenzado la tercera manga.
El adiós más amargo
En ella el número 1 del mundo ha subido el nivel, sacando bien y evitando el peligro que tenía enfrente. Lo mismo que Dimitrov, hasta el momento fatídico, pues al ejecutar la volea que le daba el 2 a 2, ha sentido algo en el pecho y se ha tenido que tirar al suelo entre evidentes signos de dolor. Tras consultar con los médicos no le ha quedado otra que decir adiós al que estaba siendo su gran día y a una victoria que podía marcar sus últimos años de carrera. Tras salvarse de la quema por esta lesión ahora Sinner tendrá enfrente a Ben Shelton en cuartos de final este miércoles.
