Sarah Almagro, una mentora de diez
La surfista es una componente del proyecto de la Junta de Andalucía que promueve valores y hábitos saludables a través del deporte
Sarah Almagro se encuentra en Gran Canaria para disputar el campeonato nacional en un fin de semana donde esta competición coexistirá con un europeo. Se trata del Gran Canaria Surf No Limit Fundación DISA 2025, que arranca este viernes en la playa Las Canteras. Una competición donde volverá a ser una de las máximas exponentes de Andalucía. En este sentido, la joven Sarah compagina su pasión por el deporte con una carrera de derecho y un trabajo espléndido en redes sociales, arraigado en la difusión de unos valores que la convierten en una deportista ejemplar. Tanto es así que es una de las escogidas por la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional de la Junta de Andalucía para liderar el programa ‘Mentor 10’. Un proyecto estratégico basado en la promoción de valores y hábitos saludables en torno al deporte.
Una labor encomiable y que para Sarah ocupa un lugar importante en su vida: ”Me hace ilusión el poder participar en este tipo de programas, de mostrar los valores que hay del deporte y también el deporte adaptado, que es a lo que yo me dedico. Entonces, bueno, yo a día de hoy es verdad que me estoy tirando un poco más con los mentores hacia los niños más pequeños y adolescentes, porque creo que son los que más necesitan ese empuje”.
Insiste la joven malagueña en la importancia de inculcar el deporte desde la fase más temprana de la infancia: “Damos charlas para visibilizar, a través de los valores del deporte, la constancia, el esfuerzo, el sacrificio y la importancia del deporte. Yo, una de las cosas que, cuando va un poco más dirigida a padres, intento mostrarles es decirles: “Por favor, no quitéis a vuestros hijos del deporte. Quitadlos de salir con los amigos, quitadlos del partido, pero no de esa actividad extracurricular que se hace durante la semana”. Sin duda, la actitud de Sarah es un ejemplo para la juventud y ella es consciente de su capacidad de superación. “Yo no sigo los patrones de esta sociedad y se puede llegar muy lejos. Entonces, bueno, gracias a ese tipo de charlas, hay chavales que empiezan a surfear o que incluso tenían pensado dejar el deporte y continúan”.
En ese trabajo de promoción de valores, también adquiere conocimientos la propia Sarah: “Al final, si algo me ha enseñado el deporte y todo lo que he vivido, es que rendirse no es una opción. Que se puede, con esfuerzo, con trabajo, con constancia. Y sobre todo, creyendo en una misma”.