Ana Peleteiro se desahoga en sus redes sociales
La atleta olímpica atraviesa uno de los momentos más duros de su vida tras sufrir un aborto hace dos semanas. En medio del duelo y la recuperación física ha decidido abrir su corazón en redes sociales para compartir el proceso y las secuelas físicas a las que se está enfrentando

Ana Peleteiro, una de las grandes figuras del atletismo español, se encuentra viviendo uno de los episodios más difíciles de toda su vida. Hace apenas unos días, la deportista gallega y su marido, el también atleta Benjamin Compaoré, anunciaban la triste pérdida de su segundo hijo en común, una noticia que ha conmovido a sus seguidores y a todo el mundo del deporte.
Desde que dieron a conocer la noticia, ambos han optado por mantener un perfil bajo, alejados de los focos mediáticos y centrados en su recuperación emocional. Sin embargo, Ana ha querido compartir con sus seguidores cómo está viviendo este difícil golpe, rompiendo un silencio que hasta ahora había sido la tónica habitual.
En sus publicaciones, Peleteiro no solo ha hablado del dolor emocional, sino también de las consecuencias físicas que está afrontando tras el aborto. “El cuerpo sigue recuperándose poco a poco, pero qué difícil es reconocerse ahora mismo”, ha escrito, acompañando sus palabras de una reflexión sincera sobre los cambios y secuelas que está experimentando.
La atleta ha revelado que, dos semanas después del aborto, aún sufre dolor intenso en el útero, lo que la ha obligado a acudir al hospital varias veces debido a algunas complicaciones en su recuperación. Aunque no ha ofrecido detalles médicos específicos, sus palabras reflejan el impacto físico que este tipo de pérdidas puede suponer, incluso en cuerpos tan preparados como el suyo.
A pesar del duro momento, Ana ha demostrado su valentía al sincerarse con sus seguidores, al visibilizar una realidad que sufren una gran cantidad de mujeres cada año y que atraviesan en silencio. Su testimonio ha sido recibido con numerosos mensajes de apoyo, tanto de seguidores anónimos como de compañeros del mundo del deporte, que le han agradecido su honestidad y empatía por su claridad.
Peleteiro y Compaoré, que ya son padres de una niña nacida en 2022, afrontan ahora un proceso de sanación conjunto, apoyándose mutuamente para salir adelante. Con su ejemplo, Ana no solo da claridad al dolor de la pérdida gestacional, sino que también recuerda que en la vulnerabilidad hay fuerza y que hablar del duelo es, en muchos casos, el primer paso hacia la recuperación.
Además, su mensaje contribuye a romper el tabú que todavía rodea al aborto espontáneo, ayudando a normalizar el dolor y a ofrecer un espacio seguro para que muchas otras mujeres también puedan expresar lo que sienten sin miedo al juicio ni a la incomprensión.