Álvaro Valles se sincera: la llamada de Monchi, el castigo en Las Palmas y "una idea fija"

No hacen falta muchas más palabras. "El Betis es el club de mi vida", ha manifestado el portero sevillano Álvaro Valles, admitiendo que sueña con volver a casa desde el mismo día que tuvo que emigrar de la cantera verdiblanca para ganarse un sitio en el fútbol profesional. No quiere dar nada por cerrado, pero el meta de La Rinconada deja caer que la decisión sólo la podría romper el propio club heliopolitano. Él lo tiene decidido. Está viviendo en Sevilla esperando al nacimiento de su tercer hijo después de recindir con la UD Las Palmas en enero, tras seis meses castigado en la grada por su negativa a no renovar y salir como agente libre. Ni siquiera el poderoso reclamo de la Premier League, la fama del tándem que forman Monchi y Unai Emery, el caramelo de jugar por primera vez la Champions o el buen nombre que el Aston Villa que se ha ganado en los últimos años fueron capaces de convencerle de su intención de esperar a verano para elegir destino. "Soy un tipo de ideas fijas", ha advertido este jueves. Más claro... agua.

En una entrevista concedida a Radio Marca Sevilla, Álvaro Valles ha admitido que recibió una llamada telefónica de Monchi y que las noticias sobre el interés del Aston Villa en hacerse con su fichaje en el pasado mercado invernal eran del todo reales aunque no llegó a haber oferta formal, pues su firme respuesta no dio pie a ello. "Estoy muy tranquilo. Es verdad que es una situación un poco peculiar que me ha tocado vivir en parte porque yo lo he decidido así. No es culpa de uno ni de otro, es algo mutuo. Es verdad que se está haciendo larga (la espera). Tengo 27 años y muchas ganas de jugar al fútbol, de volver a ejercer mi profesión", ha manifestado con claridad, asegurando que no se arrepiente de la decisión que tomó el pasado verano y que tampoco guarda rencor a la UD Las Palmas ni a su presidente, Miguel Ángel Ramírez.

Álvaro Valles y la UD Las Palmas: cariño y gratitud sin rencores

"Hay que entender a ambas partes, cada uno tiene sus razones. Ellos defienden lo suyo, que es el club y la propiedad, y yo, mi carrera y mi futuro. Soy una persona de ideas fijas cuando tomo una decisión y cuando creo que algo es lo que correcto para mí y mi familia, no suelo retroceder. Siempre miro hacia adelante", ha continuado Valles, que ha explicado que la rescisión en la entidad amarilla fue una decisión consensuada: "Fue de mutuo acuerdo, el club no quería alargarlo más y yo tampoco tenía especial interés en alargar esta situación que no estaba siendo fácil. Se llegó a un acuerdo con ellos y se toma la decisión de rescindir, y cada uno toma su camino".

"Estos últimos meses han sido bastante frustrantes, duros. No ir convocado, no jugar, saber que no tenía ningún tipo de opción... Fue una decisión del club y me toca respetarla. Yo sabía perfectamente que esa era la decisión del presidente, que también es un hombre de palabra, y él sabía mi postura. He respetado hasta el último momento al club, entrenando a tope, que era lo que tenía que hacer. Me hubiese gustado despedirme en el césped jugando delante de la afición, defendiendo los colores de Las Palmas hasta el último día, pero no pudo ser. A pesar de todo me llevo un gran recuerdo de la isla porque es donde me he hecho futbolista profesional y me han dado mucho cariño", ha agregado el cancerbero, que les desea lo mejor: "Están en un momento complicado pero es un grupo fuerte, con jugadores importantes en el vestuario que llevan bastante tiempo y creo que acabarán sacando esto adelante".

Álvaro Valles se entrena por su cuenta y mantiene intacta la motivación

En la actualidad se prepara por su cuenta para estar en forma para la 25/26: "No puedo parar y tengo que estar lo mejor posible, mejor que nunca para cuando llegue el mercado de verano, estar a tope en el lugar donde tenga que estar. Al margen de que trabajes de manera individual, si no estás preparado física y mentalmente cuando empieza la pretemporada... Serán dos meses para volver a coger esa distancia y sentirme otra vez futbolista; no creo que tenga problema y temores, ninguno. Tengo una personalidad muy grande y muy positiva. Todo va a ir bien". "Mi motivación es que tengo 27 años, muchas ganas de fútbol, de volver a ejercer mi profesión y uno entrena con la mirada puesta en el mercado de verano para firmar en un club y demostrar lo que venía demostrando hasta ahora", ha concluido Álvaro Valles.