Borja Iglesias presiona al Betis y viste la camiseta del Celta hasta en vacaciones

El RC Celta de Vigo quiere seguir contando con Borja Iglesias la próxima temporada; pero no tiene intención de alcanzar la cifra que le pide el Real Betis, que necesita que el club gallego se haga cargo de la cantidad pendiente de amortizar y que ronda los 5 millones de euros. Más bien al contrario, en Balaídos presionan para buscar una rescisión de contrato o una rebaja extrema, sabiendo que Manuel Pellegrini no cuenta con el Panda, que enero cumplirá los 33 años, que sólo tiene firmado con los verdiblancos hasta el 30 de junio de 2026 y que no para de demostrar su intención de seguir vestido de celeste. En el sentido más literal de la expresión.

Las posturas tan polarizadas y la intención de todas las partes de permanecer firmes en sus posiciones de partida caben augurar que el 'caso Borja Iglesias' se va a extender hasta bien entrado el mes de agosto; pero el jugador no para de presionar a su manera. El Celta va a jugar en Europa la próxima temporada, logro al que ha contribuido con 11 goles y tres asistencias en 39 partidos; el técnico, Claudio Giráldez, cuenta con él como pieza importante; Pellegrini difícilmente le va a dar un sitio, pues el Betis busca otro delantero al margen del 'Cucho' Hernández y Cédric Bakambu; ya vio en su amigo Juanmi Jiménez que quien sale una vez ya no suele recuperar un rol protagonista con el chileno...

Cada vez que le arriman una cámara o un micrófono, Borja no pierde la oportunidad de remarcar lo feliz que se siente por conseguir, por fin, ser importante en el equipo de su tierra y del que fue prolífico canterano; así como sus motivos para no querer volver al Betis. En el seno de la entidad, incluso, andan un poco moscas con el exceso de sinceridad del delantero; pues indudablemente sus confesiones le restan fuerza negociadora. No obstante, también se aprecia claramente que no lo está haciendo a malas y que, lejos de otros que en estas lides optan por rajar, lo que le pasa al Panda es simplemente que no puede dejar de pensar en clave celtiña.

Sus redes sociales están siendo testigo en estos primeros días de vacaciones, en los que no se quita la elástica celeste ni de conciertos. Y no sólo eso, sino que viste de esta forma -equipación del cuadro vigués con el '7' y el nombre de B. Iglesias- a todos sus allegados. El Celta, que sí ha advertido al Betis de que no cuenta con el cedido Iker Losada, ya le ha advertido al jugador de que deberá tener mucha paciencia y de que incluso es probable que no pueda arrancar la 25/26 con el resto de sus compañeros.

De momento, ni siquiera han iniciado negociaciones formales por él y van a presionar con el factor tiempo o con la necesidad del Betis de liberarse de la ficha del ariete. Creen que va a ser una cuestión de esperar, pero Borja Iglesias tiene tantas ganas de volver a ponerse esa camiseta que incluso se la lleva a festivales y playas. El verano dirá, pero el interesado hace tiempo que ha hablado y, al final, el futbolista acaba jugando donde quiere.