Pellegrini y su 'despedida' en diferido: "Se me han pasado volando estos seis años en Sevilla"

"Hicimos un partido muy sólido, tanto en defensa como en ataque. Estuvimos muy seguros de no cometer errores. Ellos tuvieron una jugada en el inicio del segundo tiempo, pero lo controlamos bien en base a tener el balón. A ellos les costaron unas pérdidas que les generaron peligro. Dejamos la portería a cero, hicimos dos goles y nos metemos en puestos de Europa League, a un punto de Champions League. Veníamos de competir el miércoles y no es fácil cuando la tensión es tan alta", aseguraba en los medios oficiales del Real Betis tras el encuentro su entrenador, Manuel Pellegrini, que se convirtió este domingo en el que más partidos oficiales ha dirigido en total a los verdiblancos, 264, superando a otra leyenda como Lorenzo Serra Ferrer. A tal efecto recibió una condecoración en el arranque de manos del presidente, Ángel Haro, con el que sigue teniendo pendiente una reunión para ver si sigue o termina contrato el 30 de junio de 2026.

"Estamos, junto al Atlético de Madrid, en posición de UEL (empatado a puntos con el RCD Espanyol). Estamos a un punto de un Elche CF, cuando nos criticaron por empatar en casa de ellos, un equipo que no pierde. El nuestro está comprometido en ir en las dos competiciones de la mano. Hoy hemos hecho cambios y, seguramente, el jueves también los va a haber. El equipo va de la mano y se está fortaleciendo", añadía el 'Ingeniero', que reservó a Giovani Lo Celso, utilizando como mediapunta a Pablo Fornals (que terminó con un tobillo lastimado por el pisotón de Sheraldo Becker) y, luego, a Rodrigo Riquelme, quedando el rosarino descansado para medirse el próximo jueves con el Ludogorets o apuntalar el once inicial el domingo ante los 'pericos', pues la semana que queda por delante volverá a ser intensa en La Cartuja.

"Será ir a jugar a Bulgaria, venir a descansar un poco e ir a jugar a Barcelona contra el RCD Espanyol. La dosificación es importante, así como la mentalidad. Ya veremos cuál es la mejor manera de enfrentar a estos equipos", sentenciaba un Pellegrini, por supuesto, abrumado por la ovación que le dedicaron los más de 50.000 béticos presentes en los graderíos: "Es una gran emoción la de haber estado tantos partidos acá; no es fácil en un club tan popular y con tanta pasión como el Betis mantenerse. Se me han pasado volando estos seis años en Sevilla, que han sido espectaculares". Unas palabras que, una vez más, suenan irremisiblemente a despedida.