La última tentación de Amrabat antes de ser verdiblanco no llegó de Nervión

Se trata de uno de los diez fichajes del Real Betis (nueve que sigan en la disciplina verdiblanca, al marcharse Gonzalo Petit cedido al CD Mirandés, donde ya descolla) que más ganas tienen de ver los aficionados verdiblancos, en gran parte por haber sido un objetivo del Sevilla FC hasta casi el 'deadline day' estival, cuando terminó decantándose por los heliopolitanos. No sólo por eso, claro está, ya que los hinchas béticos celebran que se haya reclutado potencia y pulmones para la medular, que se echaban mucho de menos tras la marcha hace dos veranos de Guido Rodríguez y en éste de Johnny Cardoso. Se reencontrará aquí el de Huizen con su compañero de selección Ez Abde, así como con un Antony Matheus dos Santos que fue compañero de fatigas en el Manchester United durante la 23/24. De todas formas, tuvo más alternativas en un frenético broche de la ventana veraniega de transferencias.

Desde la destitución de su gran mentor, José Mourinho, que pareció haberse desencantado con el poderoso pivote de origen neerlandés, su futuro parecía fuera del Fenerbahçe, eliminado de la Champions League y dispuesto a hacerse cargo de gran parte de su ficha (el 75%, de hecho, lo pagan los turcos), pues la obligación de compra abonada a los mancunianos, 12 millones de euros, no era un sinónimo de continuidad segura en la Süperlig. Buscaba también Amrabat un contexto más adecuado para asegurarse minutos los meses previos al Mundial de 2026, para el que los 'Leones del Atlas' llevan meses clasificados. Y apareció la vía bética casi sobre la bocina. Con todo, desde Francia desvelan que otro club que no era el eterno rival verdiblanco estuvo cerca de convencerle para que vistiera sus colores en esta 24/25 tras condicionante para muchos en sus decisiones.

Se trata del Paris FC, nuevo integrante de la Ligue 1, que adiestra un Stéphane Gilli al que Sofyan conoce bien, asegura 'FootMercato'. No en vano, el de Ganges fue el técnico asistente de Vahid Halilhodzic, seleccionador de Marruecos desde 2019 a 2022 los dos últimos años del veterano preparador bosnio al frente del combinado magrebí, del que fue destituido unos meses antes del Mundial de Qatar, donde ejerció con sumo éxito (alcanzando, de hecho, las semifinales en un hito histórico en el país norteafricano) Walid Regragui. El pequeño de los hermanos Amrabat, al que hizo debutar con la absoluta Hervé Renard en 2017, era ya asiduo con los rojiverdes cuando el ahora responsable de la entidad parisina formaba parte del 'staff', aunque es cierto que tocó techo, como varios compañeros, en la edición invernal del magno torneo hace casi tres años. Finalmente, los del Stade Jean Bouin, que habían perdido la pista de Benjamin André (que decidió renovar en el Lille), apostaron por la veteranía (32 años) de Pierre Lees-Melou, abonando 5,8 millones al Brest para potenciar su medular.