Carmona se quita "un peso de encima" y García Pascual tira de escudo: "No nací, pero me han hecho sevillista"

Otros dos protagonistas, el improvisado lateral zurdo José Ángel Carmona y el autor del tanto que da media salvación, Álvaro García Pascual, atendían al micrófono de DAZN antes de pasar también por los medios oficiales del club. Por un lado, el visueño reconocía que se quitan una carga importante: "Hemos sufrido mucho; era demasiado tiempo sin ganar ante nuestra gente, pero ha merecido la pena por ver sus caras de felicidad. Desde mi corazón sevillista, lo he pasado muy mal este año. Cuando no salen los resultados y la afición se va mal a casa, sientes un peso encima por fallarles, también a tus familiares. Pero, gracias a Dios, lo hemos conseguido". Sobre su pique final con Jaime Mata, le quitó hierro: "Compartí vestuario el año pasado con él en el Getafe CF y es amigo mío; fue un exceso de confianza, pero eso se queda en el campo".

El carrilero definió a Joaquín Caparrós "como un padre, pues te riñe como a su hijo; no te deja que te vengas nunca arriba". Pero la explicación más simpática sobre el utrerano la dio el delantero: "Es fútbol puro, energía... No le tiembla el pulso por poner a un canterano si lo ve preparado, venga del B, del C o del D. Apuesta a muerte por él, lo que es digno de admirar. Le da igual de dónde venga y el nombre que tenga. Lo conozco por la TV desde chiquitito, pero tenerlo aquí es un placer y un privilegio". El de Benalmádena estaba emocionado: "Al ver la pelota entrar llegaron un cúmulo de sensaciones que no sabría explicar. Había que ganar sí o sí, no nos quedaba otra. Me alegro, sobre todo, por este club y por esta afición, que se lo merecen todo. Casi me salto a la grada, porque en ese córner estaba mi familia".

Aunque su futuro es incierto y hay quien lo ve ya en el Cádiz CF, dejó claros sus sentimientos: "Es mi primer año en Sevilla FC, pero, al estar en el filial, te empapas de sevillismo. Siempre he visto a este equipo jugando y ganando la Europa League; envidiaba a los que eran de este equipo. No nací sevillista, pero me han hecho sevillista". Sobre el hostil ambiente y el refugio el pasado sábado por la noche en la Carretera de Utrera, una reflexión acertada de García Pascual: "Son momentos difíciles para todos, para la afición y para nosotros. Siempre queremos sumar los tres puntos. En Vigo no estuvimos a la altura, pero queríamos reivindicarnos con tres puntos que nos acercaran a la permanencia. Es una pena que estemos hablando de esto, pero era la final que tocaba jugar hoy... y la hemos ganado".