Un negocio muy pobre para el Valencia
Germán Valera se ha revalorizado en el Elche, donde está siendo pieza clave en un equipo que acaricia el ascenso, pero la opción de compra pactada en enero y los derechos que aún conserva el Atlético de Madrid harán que la ganancia sea irrisoria

El Valencia avanza en su planificación, a la espera de conocer si la misma recibe un impuso mediante la clasificación europea con la que sueñan en Mestalla. Son muchos los frentes abiertos. Para el centro del campo están prácticamente atados, a coste cero, Neyou y Javi Muñoz, a la espera del visto bueno de Peter Lim. Pero también se trabaja en el lateral derecho, con una oferta de renovación a la baja para Foulquier mientras se vigila al turco Taha Sahin; o en la portería, con el conocido adiós de Mamardashvili y el prácticamente seguro de Jaume Doménech, lo que hace que se manejen alternativas como las de Guaita, Sivera o Leo Román.
Además, se trabaja en las renovaciones y mejoras de contrato de César Tárrega o Diego López, al tiempo que se asume que será muy complicado convencer a Cristhian Mosquera, con muchas papeletas para ser una de las grandes ventas que se necesitan para cuadrar las cuentas, sin olvidar a Javi Guerra. Sin duda, muchos nombres propios y mucho trabajo por hacer para Miguel Ángel Corona, que mueve hilos para tratar de retener a Umar Sadiq y Barrenechea y deberá tomar también una decisión con respecto a aquellos jugadores que se encuentran cedidos en otros clubes.
En este último grupo se encuentra Germán Valera, que está sabiendo aprovechar con creces su préstamo en un Elche que tuvo cerrado su fichaje el pasado verano. Una llamada a última hora desde la capital del Turia, sin embargo, hizo que el extremo diese un volantazo. Pero tras los pocos minutos que le dio Rubén Baraja (apenas 142' en ocho partidos de LaLiga y 215' en la Copa del Rey), Carlos Corberán fue "muy sincero" nada más llegar. "Me dijo que no contaba conmigo y se agradece el gesto”, confesó el murciano, que en el mercado de enero puso rumbo, ahora sí, al Martínez Valero.
Fue clave en su banquillo la presencia Eder Sarabia, con el que brilló en el Andorra, en una de las cuatro cesiones que protagonizó siendo jugador del Atlético de Madrid (también pasó por Tenerife, Real Sociedad B y Zaragoza). Y a las órdenes del técnico vasco, Valera ha vuelto a reencontrar su mejor versión. Titular desde que aterrizó, suma 13 encuentros en los que ha firmado dos goles y tres asistencias, contribuyendo así a que el ascenso se acaricie con los dedos (tiene un colchón de cinco puntos con 12 por disputarse).
Opción de compra de 100.000 euros y 25% para el Atlético
Sobre el papel, podría tratarse de un buen negocio para el Valencia, que en realidad prefería mandarlo cedido al Arouca portugués. Pero lo cierto es que apenas sacará tajada con la revalorización del que fuese también canterano del Villarreal. Cuando se confirmó su cesión se informó de que la misma contemplaba una opción de compra de alrededor de 100.000 euros, cantidad irrisoria que el Elche no dudará en pagar, más si cabe si logra subir a Primera división. Pero es que, además, el pasado verano se acordó con el Atlético su llegada a coste cero con la condición de que los colchoneros se guardasen un 25% de su futura venta, con lo que la ganancia que dejará en las arcas de Mestalla será mínima, aún con 23 años y una importante proyección por delante. No en vano, está valorado en 1,5 millones por la web especializada Transfermarkt.