El huracán Jannik Sinner toca tierra en el Foro Itálico
Jannik Sinner ha pasado por encima de Casper Ruud sin dar ninguna opción al noruego, que venía de ganar el Mutua Madrid Open y no ha tenido la más mínima opción de hacerle frente al número 1 del mundo, que ya está de nuevo a su máximo nivel

Si alguien ha tenido desde el comienzo del Masters 1000 de Roma alguna duda sobre el nivel de Jannik Sinner después de su sanción, todas se han disipado este jueves en la pista central del Foro Itálico. El italiano ha arrollado sin contemplaciones a Casper Ruud, que venía en racha tras ganar el Mutua Madrid Open, pero ha visto como el número 1 del mundo se la cercenaba a lo grande. Dos sets en los que solo ha perdido un juego (6-0, 6-1), para confirmar que va a por todas y está para ganar ya no en la capital transalpina, si no en Roland Garros.
El inicio de Jannik Sinner fue casi tan bueno como flojo fue el su rival. El de San Cándido salió a un nivel altísimo, tirando derechas a una potencia abrumadora muy cerca de la línea, sacando a la perfección y dejando ningún espacio para la especulación. En quince minutos ya tenía una ventaja de 4 a 0 que mostraba a la perfección su tremenda superioridad. Si Ruud tiene un fuerte, ese es la consistencia, pero en esta tarde romana era todo lo contrario, muy nervioso y encadenando errores uno tras otro. Como los que le costaron un nuevo quiebre y dejaron al local a un paso del rosco, donde no falló.

Sin piedad alguna
La bola le estaba corriendo a Sinner como si no hubiera estado parado durante meses. Y así ha comenzado el segundo set, flotando por la pista y aguijoneando cada bola hasta poner un nuevo break en el primer juego de la segunda manga. Ruud, que venía de ganar en Madrid hace poco más de una semana, estaba siendo incapaz de hacer frente al número 1 del mundo. No fue hasta el tercero cuando, tras salvar varias bolas de rotura, consiguió al fin ganar un servicio.
Pero fue un espejismo, Jannik Sinner estaba en uno de esos días en los que entra en trance y no hay nada que hacer. Ruud no tenía el físico ni el toque, aunque realmente ni teniéndolo hubiera sido capaz de hacerle frente a esta versión tan sumamente superior del campeón del Open de Australia, que ha terminado cerrando el partido con un 6-1. Cada vez que ha saltado a la pista ha sido mejor que la anterior y si contra Fran Cerúndolo había podido dejar alguna duda, esta tarde la ha disipado de golpe, confirmando que está de vuelta. Ahora le toca el turno a Tommy Paul, aunque el objetivo va más allá y es Roland Garros, que arranca dentro de dos semanas.