Jannik Sinner 'pasa' de Roma
Jannik Sinner vuelve en el torneo de Roma tras u sanción, sin embargo, antes de empezar ha confesado que su objetivo no es otro que el de ir cogiendo forma, de cara a lo que verdaderamente le importa, Roland Garros dentro de tres semanas


Este 5 de mayo es el día en que la sanción de Jannik Sinner pasa a la historia, cerrando así uno de los capítulos más oscuros del pasado reciente del tenis mundial. Más de un año después de dar positivo en clostebol y tras llegar a un acuerdo con la AMA para parar obligado durante 3 meses, el de San Cándido tendrá su regreso en el Masters 1000 de Roma. Y en este lunes tan especial, en el que se va a reencontrar con el público en su primer entrenamiento abierto y en el que ha conocido su camino en el torneo, también se ha dejado ver por rueda de prensa. Y no ha dejado a nadie indiferente, confesado que realmente, este evento no es más que un trámite hacia su gran objetivo, Roland Garros.
El número 1 del mundo tiene claro que su "objetivo real" es Roland Garros y si está en Roma es para ver el nivel el nivel que tiene, "no para batir a todo el mundo", así que realmente va a tratar de probarse para saber en que punto de forma está. "Quiero pasar mi primera ronda y ver qué sucede después. Es complicado volver a empezar. Hay muchas cosas. Pero estoy muy tranquilo y bien físicamente".

La suya es una situación extraña, pues ha estado tres meses parado, con lo que eso significa, además de que lo ha llevado a su manera. De hecho, ha confirmado no haber tocado la raqueta durante el primer mes y ya una vez pasado ese plazo, retomar los entrenamientos paulatinamente hasta encontrarse a sí mismo. "Poco a poco fuimos trabajando. En el inicio en el gimnasio sobre todo. No tuvimos prisa, éramos conscientes de que se necesitaba tiempo para volver bien".
Una forma de reconectar
Los últimos meses del astro transalpino habían sido frenéticos, tanto por el positivo, del que vuelve a defender su inocencia, como por el ritmo de torneos y triunfos. Así que en realidad la sanción la ha dado un período de calma que de otra forma no hubiera disfrutado. "Hice lo posible para volver a estar bien mentalmente. He pasado buenos momentos en familia. No veía mucho tenis en el inicio de la sanción. Veía resultados, pero no partidos hasta Madrid. No podía controlar nada". No obstante, tiene ganas de estar de nuevo en el 'mood' de la competición: "lo más bonito será entrar de nuevo en un campo y ver dónde estoy, a qué nivel. No tengo miedo, estoy feliz de estar aquí. Fresco y preparado".