El árbitro 'tomó la matrícula' a Antony por su celebración en el Gent - Betis

El Real Betis disfruta de la exultante felicidad de Antony, quien está demostrando en tiempo récord la enorme influencia que puede tener en el juego cuando está contento y motivado, emociones que dejó de albergar en el Manchester United después de un fulgurante inicio tras mover 100 millones de euros en su traspaso desde el Ajax y que presentía que recuperaría vestido con la camiseta de las trece barras. El extremo paulista no ha podido empezar con mejor pie: tres partidos, los tres como titular, en todos ellos determinante y sumando dos dianas. Elegido MVP ante Athletic Club, repitió ante el RC Celta de Vigo tras estrenarse como goleador en LaLiga EA Sports y abrió el marcador en el redentor 0-3 de este jueves ante el KAA Gent, dejando también su sello en la UEFA Conference League.

Antony hizo el 0-1 a los pocos segundos de arrancar la segunda parte y no sólo dejó el mejor tanto de la noche, un golazo espectacular 'marca de la casa', sino que además protagonizó la anécdota del partido, ya que el árbitro principal del Gent - Betis, el colegiado rumano Horatiu Fesnic, le 'tomó la matrícula' al '7' verdiblanco después de permanecer atento desde la lejanía a la celebración del joven atacante para acudir rápido a pedirle explicaciones. Todo quedó en nada. No era lo que parecía.

La reanudación dejó una posesión larga del Betis, que movió el balón por todo el campo, de izquierda a derecha. Allí, Sabaly recibió y asistió en corto para Antony, quien escorado a la banda se deshizo de dos defensores con una finta y un reverso letal para internarse, perfilarse hacia su guante izquierdo y pincelar una parábola ajustada al palo ante la que nada pudo hacer el portero del Gent, que ya le había parado una muy parecida en la primera parte.

Como se puede ver en la fotogalaría que encabeza estas líneas, tras marcar su golazo Antony corrió hacia el fondo en el que estaban los seguidores béticos y, después de abrazarse con sus compañeros, se levantó parcialmente la camiseta, sin quitársela pero mostrando expresamente una prenda interior blanca con un amplio mensaje escrito con rotulador negro. Es de sobra conocido que los organismos del fútbol son muy rigurosos con este tipo de prácticas y castigan con mano dura casi cualquier lema -en España sancionaron a Callejón por acordarse del fallecido Jarque y a Messi por felicitar a su madre en su cumpleños-.

Especialmente, la UEFA persigue los mensajes de carácter político o ideológico y a Fesnic no le quedó más remedio que acercarse a Antony y, ante un Lo Celso atónito con lo que escuchaba- pedirle que volviese a levantarse la camiseta para poder leer lo que estaba escrito en su camiseta interior. El jugador del Betis, sonriendo, accedió y le mostró que sólo era un salmo, un escrito de inspiración religiosa y de fe. Un agradecimiento a Dios. El árbitro rumano le puso la mano en la espalda, le dio el O.K. y aquí acabó la anécdota.